Dos años sin retén de guardia en el parque de bomberos de Aranda

A finales del año 2020, el convenio en vigor se denunció por parte de los bomberos con la intención de negociar un nuevo acuerdo al detectarse «algunos errores». Ese convenio nunca llegó, después de que por parte de Secretaría General se informara de que no tenía encaje legal argumentando que estaba pendiente la valoración y restructuración de puestos de trabajo del Ayuntamiento.

El Consistorio arandino se escuda, desde entonces, en que la valoración de puestos será inminente. Sin embargo, han pasado dos años y, de momento, solo se tiene cumplimentada una de las tres fases marcadas y «todavía va para largo», según fuentes municipales.

Recientemente, en el pleno del Ayuntamiento se aprobaba el organigrama de la valoración, por lo que todavía están pendientes la adjudicación de responsabilidades y labores y la valoración económica. «Las partes más complicadas de la tramitación», apuntan.

Mientras todo el proceso administrativo se cumplimenta, Aranda suma dos años sin el retén de guardia, compuesto por tres efectivos que están prevenidos por si acaso se dan varios siniestros a la vez.

El pasado mes de junio, tras un año y medio ese servicio de emergencias, el jefe de Bomberos y el concejal de Personal, Vicente Holgueras, anunciaron que se iba a aumentar el número de efectivos mínimos hasta que se negociara y aprobara un nuevo convenio de retén. El responsable del cuerpo de extinción de incendios emitía un en el que considera «apropiado» aumentar a ocho efectivos los servicios mínimos hasta que se desbloqueara el asunto del retén. Un incremento de efectivos comprometido que nunca se llego a ejecutar al considerase «inasumible» económicamente por parte de los servicios de Intervención.

Durante estos dos años de precariedad, se han convocado varias manifestaciones por parte de los efectivos de bomberos para denunciar «el grave riesgo de seguridad para ciudadanos y profesionales». La última de las concentraciones se celebró el pasado mes de julio con la presencia de un millar de personas en la plaza Mayor.