Calero: «Vamos a ser fieles a nosotros mismos»

En este sentido, el entrenador madrileño, que esta mañana ha dirigido el último entrenamiento antes del partido de este domingo, ha insistido en que sus jugadores «son guerreros» que «no se arrugan ante nadie» y son «capaces de competir contra cualquiera». Así pues, el objetivo es que «luchen por su escudo, su ciudad y su gente».

Una ciudad que estará representada en Almendralejo, hasta donde se desplazarán alrededor de 2.000 aficionados. «Vamos a intentar que se sientan orgullosos de su equipo y que les haya merecido la pena el viaje. Nos gustaría que fuera un día histórico» y que la afición «pueda celebrar» el ascenso «con todo el equipo», ha subrayado Calero al tiempo que agradecía «enormemente» el «esfuerzo» que van a hacer los aficionados para acompañar el equipo. «Gracias de todo corazón. Ese puntito de ayuda que nos pueden dar puede ser clave para decidir una eliminatoria tan igualada como esta».

Y es que, el Burgos, que llega «bien», tanto en el aspecto físico como en el anímico, tendrá enfrente a un gran equipo como el Bilbao Athletic. «Es potencialmente un campeón de grupo, aunque al final no consiguiera la primera plaza. Ha marcado muchos goles y tiene un juego vertical y agresivo en ataque. Es una generación de futbolistas que, como el año pasado, está dando sus frutos», ha subrayado Calero.

A este respecto, ha añadido, «hay que dar la enhorabuena a Joseba Etxeberría porque ha conseguido compaginar el trabajo de formación de la cantera con enseñar a los jugadores a competir en la élite».

Así pues, el filial rojiblanco es un equipo «difícil» en el que es muy complicado destacar futbolistas concretos. No en vano, a pesar de que Nico Williams puede ser el «más mediático», cuenta con calidad en todas sus líneas.

Sea como fuere, el técnico madrileño espera un partido «precioso y emotivo» en el que se pueden desarrollar diferentes escenarios que habrá que afrontar. «Los partidos son como melones cerrados. Hay que abrirlos, porque no sabes si van a salir buenos o malos». En todo caso, ha concluido, el equipo está preparado, «concentrado» y «mentalizado» en el objetivo. Y ese objetivo no es otro que el ascenso.