Cronología de un mes con coronavirus en Burgos

En ese momento había contabilizados 61 casos positivos por covid-19, la cifra más alta de Castilla y León. En Burgos capital se registraban 27 casos mientras que Miranda alcanzaba la cifra de 34 contagios.

El 31 de enero se activó por primera vez el protocolo por coronavirus en Burgos. Fue un caso sospechoso en la provincia en un varón, de mediana edad y residente en China, que presentaba dolor de garganta leve y sin fiebre y que resultó ser negativo.

El primer caso positivo se confirmó el 2 de marzo. Un varón de 52 años que fue ingresado en el Hospital Santiago Apóstol de Miranda de Ebro y natural de la localidad riojana de Haro. Un funeral en Vitoria fue el foco del contagio de este primer caso.

El segundo positivo dela ciudad del Cid llegó tan solo dos días después. Una enfermera del Hospital Txagorritxu de Vitoria dio positivo en el coronavirus y fue ingresada en la zona del Hospital Universitario de Burgos acotada para ello con un cuadro febril y tras activarse el protocolo por el virus. Cuando se comprobó que era positivo se procedió a su aislamiento.

El tercer caso se confirmó y rectificó su confirmación en apenas 24 horas. Fue un varón no joven que también fue ingresado en el Hospital Santiago Apóstol de Miranda de Ebro por neumonía y que dio positivo en el primer test. Sin embargo, el contraanálisis resultó negativo.

A partir de ahí, Burgos se convirtió en epicentro del coronavirus en Castilla y León debido al foco de Miranda. El día 9 de marzo la Junta de Castilla y León clausuró tres aulas del colegio de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Anduva, en Miranda de Ebro, después de que se detectaran posibles casos de coronavirus en algunos padres.

El 10 de marzo, en la comunidad había 56 casos positivos confirmados y de ellos 39 estaban localizados de la provincia de Burgos. De estos 39, 33 estaban en Miranda, donde no dejaban de subir los casos, por lo que la Junta decretó ese mismo 10 de marzo la zona de contención reforzada en Miranda. Desde ese día se cerraron los centros escolares, las administraciones y edificios públicos, así como los servicios privados. Miranda fue la primera ciudad de Castilla y León en sufrir la cuarentena social. También fue la primera en demostrar que las medidas de confinamiento resultaban efectivas, pues mientras en toda Castilla y León el número de contagiados seguía en aumento en Miranda contenían las cifras.

El 13 de marzo los burgaleses se encontraban ya confinados en su casa, y este día fue también la fecha en la que se registró el primer fallecimiento por coronavirus: una mujer de 89 años ingresada en el Hospital Santiago Apóstol de Miranda con patologías previas.

El sábado 14, en declaración pública para todo el país, Pedro Sánchez declara el estado de alarma. En Burgos se confirma el segundo fallecimiento por coronavirus, una mujer de 101 años de edad fallece en el Hospital Universitario de Burgos (HUBU).

Para hacer frente al aumento de casos de ingresos, la UCI del HUBU, que cuenta en una situación normal con 26 camas, ha ido ampliando el servicio hasta llegar a las 85 camas 'funcionales' que posee ahora.

El viernes 20 de marzo, el Hospital Universitario de Burgos (HUBU) comenzó el montaje de las carpas exteriores en las que se realiza el triaje de personas afectadas o con síntomas de coronavirus. De esta forma, se realiza un primer cribado para que solo ingresen los pacientes graves y así el resto puedan irse en aislamiento a sus domicilios.

En este punto de la pandemia, las cifras comienzan a aumentar en otras provincias de la región, por lo que el foco deja de centrarse en Burgos, donde la contención comienza a notarse. Salamanca, León, Segovia y Valladolid son las provincias que más casos nuevos suman.

El jueves 26 de marzo se instaló un punto Covid-auto en San Amaro para realizar pruebas a personas con síntomas de estar infectadas por coronavirus y que habían citado con anterioridad para ello. Las muestras tomadas, sin bajar del coche, se envían a analizar en laboratorios, por lo que no se conoce el resultado de inmediato al no tratarse de test rápidos.

Ese mismo jueves 26 de marzo la Junta intervino la residencia de ancianos Valle del Cuco en la localidad burgalesa de Adrada de Haza, donde vivían 48 residentes.

25 días después de que Burgos entrase en cuarentena social hay confirmados 985 casos, 103 fallecidos y 343 pacientes que han sido dados de alta. Además, en Burgos hay 5.127 personas en aislamiento domiciliario con síntomas, pero sin haber sido diagnosticados.