La cosecha del forraje en Burgos cae entre un 70 y un 80%

Así que, se confirma un «desastre total» en el forraje, según Delgado, ya que se vaticina entre un 70 y un 80 % menos de producción y de pérdidas en muchas fincas de la provincia burgalesa. Esto repercute en la ganadería porque este forraje es la hierba que se da al ganado.

La cosecha de cereal también está en marcha y, como ya se adelantó, se sigue hablando de un 50 % menos de producción en el campo burgalés. «Las sensaciones propias y lo que nos comentan los agricultores es que la gente ha dado mucho parte de sequía y de pedrisco», asegura Pardo. En este sentido, lo que las organizaciones agrarias piden a los seguros es que no se tarde tanto en peritar.

El pedrisco ha hecho mucho daño al campo. Se comenzó con sequía durante la siembra y, después, las lluvias han sido desequilibradas. Unas lluvias que en ocasiones han sido granizo de gran tamaño. Ha llovido mucho en unas zonas y en pueblos cercanos ha podido no caer nada. Debido a estas últimas lluvias, lo que también ha crecido en el campo es mucha hierba. «En la zona de Treviño parecía que se estaba cosechando alfalfa, porque se veía más alta la hierba que el cereal», ejemplifica Pardo.

Gabriel Delgado confirma que el cereal «no es de la calidad que se esperaba». Estas últimas lluvias no han ayudado ni a engordar ni a aportar calidad al trigo. «Al haber caído tan concentradas en algunos puntos y tan poco en otros, ha sido muy relativo», añade Delgado.

Con todo, Susana Pardo asegura que los precios están «en bajada». Esto se debe a que «estamos en un mercado global y a nivel mundial las perspectivas de producción no son tan malas como en la provincia de Burgos».

A un año de baja producción y mala calidad, a una campaña de cosecha de cereal «mala y atípica», se suma la competencia que los agricultores burgaleses van a tener al vender su materia frente a la de otros productores que la puedan vender más barata.

La rentabilidad que esperan los agricultores burgaleses es muy baja. A todo ello se suman los costes de producción, que este año han estado disparados. Por ello, Delgado reconoce que «hay agricultores de forraje, por ejemplo, que van a dejar sin cosechar la tierra. La producción ha sido tan baja y los costes de cosechar son tan altos que no compensa», lamenta el secretario general de UPA.