Vecinos de Villatoro también se echan a la calle en contra de las barracas

En la tarde del viernes 11 de marzo los vecinos se han citado en el centro cultural del barrio, a las puertas. Pancartas en contra de las barracas, carteles en los que se podía leer «menos barracas y más aceras», cacerolas, cencerros y muchos gritos. El malestar era evidente y se ha hecho más patente cuando se ha optado por cortar la calle Laredo.

Los gritos de los vecinos eran un ejemplo de sus reivindicaciones: «De la Rosa dedícate a otra cosa», «ni barracas, ni grietas en las casas», «alcalde, las barracas a tu calle», «paga ya un recinto ferial». Y es que, como ha explicado Sergio Portillo, presidente del Consejo de Barrio de Villatoro, los vecinos se sienten ninguneados. «Son múltiples las reivindicaciones que este barrio acumula y las promesas incumplidas en años y ahora se acuerdan de nosotros para poner las barracas», explica.

Portillo explica que gran parte de los vecinos son conscientes de que son necesarias las barracas, «después de dos años duros y hay otras ubicaciones que no molestarían, pero en la calle Laredo ocasionarían grandes problemas para el barrio por el desvío del tráfico».

La carretera N-627 atraviesa el barrio, los problemas con el tráfico siempre habían sido un problema, por la velocidad y los atascos. Se instalaron semáforos y la calle Laredo es otra vía que alivia la carga. «Si se cierra el tráfico en la calle Laredo, los atascos que se formarán aquí serán enormes, a lo que se suma el peligro. No estamos diciendo que no se pongan barracas, no somos los malos de esto. Cuando el concejal vino al barrio nos dijo que se barajaban otras ubicaciones», explica.

Más de un centenar de vecinos del barrio han acudido a la llamada, tras los gritos iniciales en el centro cultural, pegado a la N-627, han optado por dirigirse a la calle Laredo. Allí, pasando por los pasos de cebra continuamente han conseguido parar el tráfico y evidenciar su malestar. Ahí también se han vivido los momentos de más tensión ante el hartazgo de algunos conductores por tener que estar esperando y los gritos de los vecinos.

En el dinosaurio ubicado en esa rotonda donde se pretenden instalar las atracciones infantiles, el punto más cercano al barrio, se podía leer una pancarta: «contra el olvido institucional».

Y es que como ha relatado Portillo «son numerosas las demandas que durante años no se han atendido. Creemos que, si se ubican las barracas cerca de Villatoro, pero no en la calle Laredo, puede ser una oportunidad para que la gente y el Ayuntamiento entiendan las necesidades de Villatoro. Tendrán que venir en coche, no hay aceras que comuniquen el barrio con la ciudad. Con el peligro que supone venir andando o luego los problemas para aparcar o atascos».

Todas las noticias de Burgos, en BURGOSconecta.