El Hospital Divino Valles se prepara para acoger a los pacientes tras el cierre del San Juan de Dios

«Cuando se cierre el San Juan de Dios», ha apuntado Igea, «esta patología será asumida por el HUBU» y el Divino Valles «ya se está preparando» (y, de hecho, en el presupuesto de 2022 hay partida para la reforma). De este modo, los pacientes de paliativos, y también los de media y larga estancia, que se han venido derivando al San Juan de Dios, se remitirán cuando llegue el momento al Divino Valles.

Su atención está «garantizada», insisten fuentes sanitarias, y por lo que se refiere a las cirugías que también se derivan al San Juan de Dios, se seguirá haciendo hasta el 31 de diciembre, fecha en la que finalizaría el convenio. Se hará como hasta ahora, que se les remitirán las intervenciones que puedan asumir en función de sus recursos. Y, poco más se sabe al respecto.

Desde la Consejería de Sanidad no han querido ofrecer más datos, asegurando que «la información sobre la atención a los pacientes de paliativos en Burgos se hará pública oportunamente», según han contestado a una pregunta realizada por BURGOSconecta. Así que, por ahora, se sabe lo que ya se sabía, pues Sanidad anunció que sería el HUBU y el Divino Valles los que asumieran la carga del San Juan de Dios cuando, en abril, se comunicó la intención de rescindir el contrato con la orden hospitalaria.

Y en el propio hospital privado, mientras la dirección declina dar explicaciones, los trabajadores solo saben lo que les dijeron el martes, cuando les convocaron para anunciarles que el hospital se cerraba y ellos se iban a la calle «en un mes». Este jueves había intención de presentar el expediente de extinción de empleo, que afecta a un centenar de trabajadores, con los que se negociarán las condiciones la próxima semana.

La portavoz del comité de empresa, Pilar López-Gómez, reconocía el miércoles que todavía estaban recibiendo pacientes y que estaban atendiendo a medio centenar, pero que nadie les había explicado cuándo dejarían de llegar las derivaciones o qué pasará con los pacientes ingresados cuando el San Juan de Dios se cierre. Los asumirá el HUBU, lógicamente, pero nadie explica ni el cómo ni el cuándo.

La noticia del cierre del San Juan de Dios ha tenido ya sus consecuencias políticas. Desde el Grupo Municipal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Burgos, Carolina Blasco, ha exigido a la Junta «certidumbre» en torno al futuro sanitario de Burgos. A su juicio, «la gestión del convenio con la orden hospitalaria ha sido un auténtico escándalo durante los últimos dos años, con idas y venidas constantes, en las que la Gerencia Regional de Salud ha sido incapaz de dar viabilidad a un centro con una función que no tiene alternativa en estos momentos en la ciudad«.

Blasco ha recordado que el San Juan de Dios es una institución con décadas de trayectoria a sus espaldas, que a día de hoy garantiza la cobertura de media y larga estancia, así como los cuidados paliativos y determinados servicios y cirugías. «Burgos no puede perder ni una sola infraestructura sanitaria y menos en la peor crisis sanitaria en décadas», ha aseverado Blasco, quien ha calificado de «injustificable» la fórmula elegida para la rescisión del convenio.