Vuelven a licitar el contrato de alumbrado para renovar 20.000 luminarias en Burgos

Al menos así lo ve el concejal de Ingeniería Industrial, Adolfo Díez, quien asegura que este contrato «transformará la ciudad». Lo más destacado será la sustitución de las actuales luminarias por luces led, un cambio que afectará a 20.000 farolas y permitirá mejorar la calidad de la iluminación mientras se ahorra energía, y también dinero.

De entrada, las luces led tienen un consumo menor que las iluminarias antiguas, explica el edil. Y, además, su tecnología permite modular la luz que emiten pero sin perder calidad, algo que ocurre ahora si se apaga una sí y una no como medida para ahorrar (y que fue la que aplicó el Partido Popular en la anterior crisis económica dentro de su plan de ahorro, matiza Díez).

La luz led es «más natural», así que la sensación que ofrece es de mejor iluminación, frente a las luminarias actuales. A este respecto, el concejal recuerda que existe una normativa que regula la intensidad lumínica, los mínimos de iluminación externa y la homogeneidad de la misma. Y, por ahora, en la ciudad «se cumple», pese a las críticas que se han lanzado actualmente.

Si hay alguna duda, apunta el concejal, se debe dar el lugar exacto para comprobar los niveles. Y los datos dirán si es verdad que hay poca luz, como ha denunciado el PP en algunas zonas de Gamonal. Adolfo Díez está convencido de que con las luces led esa sensación de poca iluminación desaparecerá, y además se ahorrará energía.

Eso sí, habrá que esperar todavía unos meses para ver instaladas las nuevas luminarias. Tras aprobarse el procedimiento administrativo a finales de diciembre, el Ayuntamiento acaba de publicar la licitación del contrato en el portal del contratatista. Las empresas tienen hasta el 22 de febrero para presentar sus ofertas y, luego, hay que examinarlas ante de adjudicar el contrato.

Eso llevará unos meses, por lo que es probable que haya que esperar hasta 2024 para disfrutar de esa iluminación más moderna. Mientras, el Ayuntamiento sigue vigilando las farolas y atendiendo las quejas de los ciudadanos, como las más recientes sobre el encendido nocturno y el apagado diurno de las farolas, que siempre genera polémica.

Adolfo Díez ha explicado que el sistema se rige por el reloj astronómico, que es el que determina las horas en las que amanece y anoche. En función de esos datos, y con la correspondiente actualización diaria, se encienden y apagan las farolas. Sin embargo, cuando el día es más oscuro, parece que amanece más tarde y anochece antes,y da la sensación de desajuste en la iluminación de calle.

Para solucionar el problema se ha optado por retrasar el apagado y adelantar el encendido, lo que generará otros problemas en breve, aventura el concejal. En cuanto empiecen a crecer los días y lleguen jornadas más luminosas, habrá muchos que critiquen que las luces están encendidas cuando es de día. Sin embargo, prefieren pasarse que no llegar.