UPA-COAG reclama apoyo a la Consejería y a las diputaciones para alimentar al ganado

Con la sequía desde primeros de año y los pastos vacíos, según la Alianza «el ganado está comiendo lo almacenado para el segundo semestre del año, por lo que los ganaderos atípicamente para las fechas en las que nos encontramos van a tener que recurrir mucho antes de lo previsto a la compra de alimentación».

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Por este motivo, la Alianza UPA-COAG considera necesario que se ponga en marcha un Plan de Rescate excepcional por parte de la Administración regional y por parte de las diputaciones provinciales ante las circunstancias tan adversas que están atravesando los ganaderos. «Los profesionales del sector no necesitan un apoyo testimonial y solidario a través de gestos o declaraciones como ya se han producido, sino una medida concreta y eficaz como es la subvención destinada a sufragar un coste de producción básico como es la compra de comida para los animales».

Por otro lado, «esta acuciante sequía está empezando a provocar una menor productividad en las granjas lecheras, lo que se suma al problema de los sobrecostes del pienso y por lo tanto a una falta de rentabilidad, lo que vuelve a poner encima de la mesa la realidad de que una vaca muerta valga más que una viva».

Indican que si hace dos años alimentar a una vaca podía costar al día unos seis euros, «ahora ya hablamos de más del doble, y la situación puede ser peor en las próximas semanas».

Ante esta situación «extrema», la organización considera que siendo necesario no es suficiente que se modifique la PAC o que se adopten medidas como las bonificaciones fiscales. Por este motivo, «consideramos que Junta y diputaciones provinciales deben adoptar medidas ya mismo con ayudas directas, porque de lo contrario, muchas explotaciones van a tener que cerrar y el daño coyuntural que pueda producir la sequía se convertirá en estructural».