En una esquina, dentro de un comercio o donde antes se situaba un negocio. Las máquinas expendedoras han ido sustituyendo, en muchos rincones de la provincia de Burgos, a otros locales donde se vendían productos típicos y no tan típicos de la tierra.
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Estas máquinas ... expendedoras ofrecen un amplio abanico de alimentos, bebidas y otros objetos que pueden necesitarse en un momento concreto. Además, a lo largo de la provincia de Burgos hay algunas más curiosas, que venden productos inusuales y que despiertan el interés tanto de compradores como de paseantes que se topan con ellas.
Por ejemplo, en Burgos hay varias máquinas expendedoras que venden pizzas recién hechas, una en plena calle San Lorenzo que sustituyó a una antigua pizzería, aunque aún conserva su nombre. Estos alimentos están precocinados pero, en el momento, el cliente puede escoger la variedad de pizza que desea y, en tres minutos, obtenerla fría o caliente y en una caja lista para llevar.
Otra de las máquinas expendedoras curiosas que hay en la provincia se encuentra en un local de la calle Rosales, de Aranda de Duero. En un espacio «abierto 25 horas» hay varias máquinas en las que se puede comprar multitud de productos.
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Por ejemplo, el cliente puede obtener en varios minutos una hamburguesa de ternera, un sándwich, unas patatas «braviolis» e incluso un kebab.
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Galletas, aperitivos o bebidas son otros productos más comunes que se venden en este local, que es un espacio abierto con las paredes cubiertas de máquinas expendedoras. También se pueden adquirir helados.
Sin embargo, en la provincia de Burgos, concretamente en Briviesca, hay una máquina expendedora distinta a las demás. Esta vende un producto típico del municipio de la Bureba: las almendras garrapiñadas. Un alimento que ha podido salvar más de una merienda o noche de juerga a los que viven y visitan la bien trazada.
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Además de las tradicionales almendras garrapiñadas en diferentes envases, esta máquina también ofrece productos como perlas de chocolate, almentras trufadas u otros frutos secos garrapiñados, como anacardos, pipas de calabaza, de girasol o cacahuetes.
Por otro lado, hay productos que venden las máquinas expendedoras que pueden ser necesitados en alguna emergencia. Se trata, por ejemplo, de productos de parafarmacia. En otra máquina expendedora de Briviesca ofrecen productos como desodorantes, pastas de dientes, productos para la regla o leche en polvo, entre otros.
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Más vistas son las instalaciones que venden preservativos. Estas se suelen ubicar en los bares o pubs, sobre todo en la zona de los baños.
Además, suelen contar con frases jocosas como: «¡Hoy sí, seguro!». Estas palabras suelen hacer mención a la propia oportunidad de utilizar el preservativo y también a realizarlo de forma segura, previniendo infecciones de transmisión sexual.
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Finalmente, quedarían otras más típicas y comunes. Sería el caso de las que ofrecen agua, café u otras bebidas refrescantes envasadas en latas. En esta categoría también se situarían las máquinas expendedoras de aperitivos, como las que suelen estar en residencias o universidades, que ofrecen pequeñas bolsas de galletas, patatas fritas y otros refrigerios.
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