La Guardia Civil investiga la aparición de clavos en la carretera de Cardeñadijo

Un acto de vandalismo muy peligroso. La Guardia Civil está investigando la aparición reiterada de kilos y kilos de clavos y tornillos en la calzada de la BU-800, que une Burgos capital con la localidad de Cardeñadijo, y por la que circulan cada día cientos de vehículos, muchos de los cuales han sufrido innumerables pinchazos en los últimos meses.

La cosa, no obstante, viene de mucho tiempo atrás. Según explica Daniela Grijalbo, alcaldesa de Cardeñadijo, años atrás era hasta cierto punto habitual encontrar clavos y tornillos esparcidos por «algunas calles del pueblo». Sin embargo, tras la pandemia, comenzaron a aparecer en el tramo de carretera entre Cardeñadijo y Burgos.

La situación se ha agravado en los últimos meses, en los que la aparición de clavos y tornillos en la carretera ha sido una constante, sobre todo durante los fines de semana, lo que ha provocado una enorme alarma entre los vecinos de Cardeñadijo y de todos los pueblos que circulan por ese tramo, que no son pocos. Otro pueblo de Burgos, Fuentelcésped, en la Ribera del Duero, también sufrió hace unos meses una ola de actos vandálicos en la que se atacaba igualmente coches y edificios.

De hecho, los daños materiales provocados por los clavos y tornillos son enormes. «Hay vecinos del pueblo que han tenido que cambiar hasta seis veces las ruedas del coche» por pinchazos. Raro es el que se ha librado de tener un tornillo clavado en la rueda durante los últimos meses. «Algunos han tenido que cambiar una rueda recién cambiada», resume Grijalbo.

A estos daños, no obstante, se les suma otra cuestión que no hace sino incrementar la alarma, como es la seguridad vial. «De momento, tenemos suerte de que no ha pasado nada grave», pero el reventón de una rueda en plena circulación puede provocar un accidente en cualquier momento, subraya Grijalbo.

Así, a la vista de los daños y del peligro inherente, el asunto ya está en manos de la Guardia Civil, que está investigando con todas las pruebas y testimonios posibles, para intentar identificar al supuesto autor (o autores) del lanzamiento de tornillos y clavos.

En este sentido, ya se ha dado aviso a los vecinos afectados para que «guarden las facturas» de las reparaciones con el objetivo de reclamar su pago si finalmente se localiza al autor. Eso sí, a raíz de la denuncia ante la Guardia Civil, no se han detectado nuevos lanzamientos «en las últimas dos semanas», según afirma Grijalbo.

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