Burgos roza las cifras prepandemia en turismo rural con 107.175 viajeros en 2022

Las últimas cifras de diciembre de 2022 cierran un año en el que se incrementó un 50,5 % el número de personas que visitaron la provincia burgalesa el pasado año (71.188) y un 47,8% en las pernoctaciones registradas en 2021 (166.700)

Este impulso dejó unos guarismos propios de nivel prepandemia al notificar el tercer mejor dato de viajeros en la última década (un 5,08% menos de los 112.621 contabilizados en 2018) y el segundo en la estadística de pernoctaciones desde 2012 (un 0,84% menos que el mejor dato, las 248.440 pernoctaciones de 2019).

Burgos atrajo en su mayoría turismo nacional con un 90,04% de viajeros residentes en España (96.500) por un 9,96% de visitantes extranjeros (10.675), reparto similar en cuanto a las personas que hicieron noche en tierras burgalesas con un 93,22% de los primeros (229.661) y un 6,78% de los segundos (16.713).

Julio, agosto y septiembre fueron los meses de mayor flujo turístico en el ámbito rural en Burgos superando los once mil visitantes en ambos casos, cifra que también se rebasó en abril por la temporada de Semana Santa.

Castilla y León se acercó igualmente en 2022 a las cifras prepandemia en turismo rural, con un total de 1.770.311 pernoctaciones (apenas 55.000 menos que en 20199, y que además suponen un crecimiento del 25,1 % respecto a las de 2021 (1.414.876).

Estas cifras continúan situando a Castilla y León como líder en datos de turismo rural en España también en lo relativo a viajeros, con 743.605 contabilizados que superan en un 32,5 % los de 2021 pero se quedan aún por debajo de los 824.537 de 2019.

De esta manera, la comunidad agrupa uno de cada cinco viajeros, dado que los 687.884 registrados en los alojamientos de turismo rural supusieron el 19,7 % de los 3.492.956 viajeros residentes en España, y las 1.657.661 pernoctaciones registradas suponen el 18,5 % de las 8.943.632 de viajeros nacionales. La estancia media fue el único dato negativo de turismo rural en Castilla y León con 2,38 días, aún sin llegar a los 2,53 notificados en 2021.

En cuanto a las pernoctaciones en el resto de provincias, Segovia, con un crecimiento del 73,4 % en pernoctaciones (260.603) fue la única que creció más que Burgos. Tras ellas se sitúan las subidas de Valladolid, del 30,5 % (97.596); Soria, con un 27,5 % más (174.693); Palencia, con un 23,6 % (109.411); Zamora, donde aumentaron un 22,1 % (148.791); y Ávila, con un crecimiento del 21,4 % (330.791).

Más moderadas fue la subida de Salamanca, con un 3,4 % hasta alcanzar las 177.644 pernoctaciones, mientras que en León fue el único territorio donde descendieron un 3 % hasta las 224.404 respecto al año pasado.

En cuanto a viajeros, las mayores subidas también tuvieron lugar en Segovia, con un incremento del 68 % hasta los 120.052 viajeros; seguida nuevamente de Burgos y de Zamora, cuyos 67.232 viajeros supusieron un 40 % más que los registrados en 2021.

Por debajo del 40 % de incremento se sitúan Ávila, con un 37,9 % más de viajeros (125.248); Valladolid, que creció un 34 % en número de viajeros (42.850); Palencia, donde el crecimiento fue del 29,7 % (43.871); Salamanca, con una subida del 25 % (78.005); y Soria, que creció un 23 % hasta los 65.193 viajeros. La cara negativa la presentó León, única provincia donde disminuyó el número de viajeros un 4,8 % hasta los 93.974 en 2022.