Los apartamentos turísticos de Burgos continúan al alza con un 13% más de viajeros que en 2022

Los últimos datos publicados este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE) permiten una mirada más amplia de la tendencia alcista de este tipo de alojamientos en los últimos años, sobre todo a raíz de la pandemia de covid-19 iniciada en 2020.

Entre junio, julio y agosto del verano prepandemico de 2019, fueron 13.315 los viajeros que optaron por esta opción para visitar la provincia burgalesa.

Desde entonces, cuando se notificaron 4.691 personas hospedadas, el incremento registrado en este período concreto durante los tres años posteriores (sin contabilizar 2020) ha subido hasta rozar un 60% más de viajeros en los apartamentos turísticos.

Similar pero algo menos acentuada ha sido la evolución alcista en las pernoctaciones. En 2019, estos alojamientos reflejaron un total de 13.315 registros, cifra que ha ido escalando con el paso de los años hasta alcanzar un 45% más de estancias nocturnas en el dato de este verano.

Por otro lado, en el acumulado del año, el 2023 ya se situa casi un 28% por encima del cifrado en los ocho primeros meses de 2022 en cuanto a pernoctaciones y un 35,4% en cuanto a viajeros.

En este útimo parámetro, el dato hasta agosto llega hasta las 23.739 personas hospedadas y se queda a 460 viajeros de igualar el total de todo el año pasado, 24.199, en un claro ejemplo de como los apartamentos turísticos están en auge de popularidad, una moda que crece cada año a pesar de las medidas para frenar su avance en algunas capitales como la burgalesa.

Otra muestra de su proliferación en los últimos años es el aumento en cuanto la estimación del número de plazas y los apartamentos en los que se reparten. En promedio, Burgos ha contado con 741 plazas en 185 apartamentos este verano 2023, por las 684 de media repartidas en 179 alojamientos, lo que supone un aumento del 7,7% en el primer parámetro y un 3,2% en el segundo.

Más evidente resulta la comparación con las medias prepandemia. En la época estival de 2019, las plazas se quedaban en 443 para un total de 93 apartamentos turísticos en la provincia, guarismos que exponen una diferencia negativa del 40,2% y casi un 50% respecto a las cifras de este año.

Por contra, el grado de ocupación ha ido creciendo proporcionalmente para mantenerse en un 35% en función de las plazas existentes y en un 52% en cuanto a alojamientos entre semana, cifra que alcanzó el 68% los fines de semana este estío.

Los porcentajes fueron similares durante la pasada época veraniega, con un 33%, un 45% y un 61% respectivamente y presentan una variación menor que en otras estadísticas si se comparan con los datos de 2019, cuando el primer dato se mantenía en el 32%, el segundo en un 44% y el tercero en un 57%.