Secciones
Servicios
Destacamos
La búsqueda de viviendas en alquiler en Burgos capital se antoja ahora mismo complicada. El desequilibrio entre oferta y demanda provoca cierta tensión en el mercado y el sector está abriéndose poco a poco a formatos que hasta ahora eran prácticamente residuales en la ... ciudad, como son los bajos comerciales y oficinas en entreplantas transformados en viviendas.
Así lo corroboran los propios agentes inmobiliarios que siguen día a día la evolución del mercado. Así, aunque no se puede hablar de 'boom', lo cierto es que en los últimos tiempos «se está notando mucho más interés» por este tipo de viviendas que el que había hace apenas unos años, resume Estefanía Álvarez, administrativa de Inmobiliaria San Pablo, quien reconoce que ya se trata de una modalidad totalmente asentada en otros puntos de la geografía española que ha comenzado a cristalizar también en Burgos.
En este sentido, explica, son varios los factores que parecen estar detrás de la proliferación de esta tipología de viviendas. A su juicio, la clave es que «la oferta de pisos en alquiler de Burgos no cubre la demanda» existente. A eso se le añade la presencia de «muchísimos locales y oficinas vacías» en la ciudad, sobre todo a raíz de la pandemia de la covid-19 y la implantación del teletrabajo en algunas empresas, lo que forma un cóctel perfecto para el despegue de este tipo de viviendas.
Javier Achirica
Presidente del Colegio de Arquitectos
Una visión muy similar mantiene al respecto Javier Achirica, presidente del Colegio de Arquitectos de Burgos, quien también corrobora el aumento de este formato de viviendas en el mercado en los últimos tiempos. «Al final, se trata de dar una salida» a espacios sin uso, subraya Achirica, ya sea porque nunca lo han tenido y permanecen en bruto, o porque el negocio ha cerrado. Y es que, según defiende, «cuando un negocio echa la persiana a menudo es difícil que la vuelva a levantar» hoy en día, teniendo en cuenta factores como «la falta de relevo».
Así, el presidente del Colegio de Arquitectos también considera que la transformación de esos locales y oficinas en viviendas puede ser una solución a la falta de oferta de alquiler de la ciudad. Una solución que, además, es generalmente «más barata». Evidentemente, cualquier proyecto de este tipo «requiere un proyecto» específico y debe recibir el visto bueno del Ayuntamiento, pero aún así «suele salir a cuenta», ya que el precio del metro cuadrado de un local es generalmente más bajo que el de una vivienda, aunque también deba ser reformada.
A mayores, Achirica apunta a otro potencial beneficio de esta tipología de viviendas. No en vano, que un bajo comercial o una oficina en entreplanta tenga actividad repercute positivamente en el resto del inmueble y, sobre todo, en las viviendas de las primeras plantas, que pueden tener «ahorros en materia energética» y beneficiarse del mantenimiento de locales que, en caso de esta vacíos, generan algunas problemáticas.
Según explican desde el sector inmobiliario, en la mayoría de los casos, se trata de «estudios», de una o dos habitaciones, con la cocina y el salón integrados en un sólo espacio diáfano, una distribución muy adecuada para una parte importante de los potenciales inquilinos.
Noticias relacionadas
Gabriel de la Iglesia
Aythami Pérez Miguel
Gabriel de la Iglesia
Y lo cierto es que, una vez en el mercado, este tipo de viviendas vuelan. «El mercado de alquiler en Burgos es muy rápido», porque «hay muchísima demanda», y en el caso de viviendas en las que se estrena reforma y tienen un precio contenido, más todavía, señala Álvarez. En su inmobiliaria, de hecho, se ha dado el caso de conseguir alquilar la vivienda «incluso antes de tener la obra de reforma completada».
Eso sí, no todos los locales y oficinas pueden tener una segunda vida como viviendas. El factor determinante en este sentido es «la ubicación», según apuntan desde el sector. Así, por ejemplo, en el centro de la ciudad se antoja difícil transformar un local en una vivienda residencial, habida cuenta del precio que se paga por metro cuadrado, mientras que en otros barrios es más sencillo. Es allí, en zonas residenciales, donde mayor número de locales vacíos hay a día de hoy. En muchos casos, además, se trata de locales en bruto, que jamás han albergado actividad comercial alguna, lo que facilita mucho una eventual reforma y conversión en vivienda.
A partir de ahí, hay varios factores clave a valorar, como los metros de fachada y, por tanto, la entrada de luz natural, los accesos y la propia superficie de los locales y oficinas. En este sentido, se han dado casos en los últimos tiempos en la ciudad en los que un local grande se ha dividido en varias viviendas, lo que implica una mayor rentabilidad económica para el promotor, explica Álvarez.
Ese es, precisamente, otro de los factores clave para entender la paulatina proliferación de este tipo de viviendas. No en vano, la mayoría de las reformas desarrollas en los últimos tiempos responden a actividades inversoras. «Normalmente son particulares o empresas pequeñas de Burgos», que al detectar una oportunidad en el mercado, se lanzan a la inversión con el objetivo de sacar un rendimiento económico a largo plazo a través del alquiler. De momento, eso sí, Burgos permanece fuera de los circuitos de las grandes empresas nacionales e internacionales que copan el mercado en otros puntos de España.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La bodega del siglo XIV que elabora vino de 20 años y el primer vermut de Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.