Ebrovisión se adapta a la covid-19 y prepara un festival de menor formato con grandes bandas

En este sentido, desde la asociación se insiste en que «es el momento de volver a la actividad», ya que «la música es parte fundamental de nuestras vidas, así como la fuente de ingresos de miles de familias que llevan meses en el dique seco».

De hecho, tras el parón de actividad obligado por la pandemia de la covid-19, el colectivo mirandés ha ido recuperando poco a poco su actividad, organizando en los últimos meses hasta siete conciertos de pequeño formato en la Fábrica de Tornillos. No es lo ideal, sin duda, pero lo importante es que la música ha vuelto a sonar.

Sin embargo, la situación sanitaria aún no permite hacer planes a gran escala, y tiempo atrás ya se confirmó que la edición especial preparada para el año pasado, que tuvo que cancelarse, volverá a retrasarse, en este caso para 2022. Será entonces cuando Ebrovisión celebre con todas las de la ley su vigésimo aniversario y despliegue una programación que, por cierto, continúa siendo secreta. Aquellos que ya tuvieran previamente en su poder los abonos para el festival de este año cuando aún no se sabía qué iba a pasar, podrán mantenerlos de cara a la edición de 2022. Quien prefiera o necesite devolverlos podrá hacerlo hasta el 25 de junio a través del correo electrónico del festival.

Pero mientras tanto, algo había que hacer. Y la solución pasa por la celebración de un festival diferente al habitual, con artistas y bandas de tremendo empaque, pero en formatos reducidos y cumpliendo los protocolos para evitar grandes aglomeraciones. Para ello, el festival pivotará en esta ocasión en dos conceptos básicos: ampliación del número de escenarios con la puesta a disposición del teatro Apolo y el Castillo de Miranda y reparto de fechas a lo largo del verano.

De momento, y a la espera de que el cartel se amplíe el festival de este año se dividirá en cinco fechas: 2 y 17 de julio y el 3, 4 y 5 de septiembre. La primera de las jornadas se llevará a cabo en el Teatro Apolo y tendrá a Shinova como invitado de excepción.

Quince días después, el 17 de julio, será el turno de Mujeres y Grises, dos de las bandas más en forma del panorama nacional, que estarán acompañadas por los mirandeses Teleclub DJ's en el Castillo de la ciudad del Ebro. En este caso, el concierto será al aire libre, pero siempre con unos estrictos protocolos sanitarios.

Ya en septiembre, Ebrovisión regresará a su ecosistema habitual, con tres citas consecutivas en el Multifuncional de Bayas, una instalación que se adaptará a los protocolos que en ese momento estén vigentes, los cuales todavía no se conocen.

Para estas tres jornadas, la asociación mirandesa contará con la presencia de Sidonie y Tina Pámpano (3 de septiembre), La M.O.D.A. y La Trinidad (4 de septiembre) y Corizonas (4 de septiembre a mediodía).

Las entradas para los conciertos confirmados ya están disponibles en la web del festival, excepto las de Shinova, que se venden en Vivir Miranda. Y desde la asociación Amigos de Rafael Izquierdo avisan: los aforos son muy limitados, así que habrán que darse prisa por comprar las entradas.