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El Burgos CF tiene un problema en el área. La sequía de sus delanteros en las 23 jornadas que han transcurrido de este curso deja un bagaje escaso para los jugadores de ataque, que han conseguido tan solo dos goles. Y es que no está siendo la temporada de Fer Niño ni de Edu Espiau, que entre los dos han logrado convertir dos dianas, las dos en las botas de Fer Niño.
Para ayudarles a mejorar estas cifras ha llegado Mimbacas, jugador con el que Michu, director deportivo del Burgos CF, considera que la delantera está cerrada. Pero el uruguayo ha llegado lesionado y, aunque considera que está listo para jugar, su entrenador, Luis Miguel Ramis, ha asegurado que todavía le queda tiempo de recuperación y acomodo para estar al 100%.
Edu Espiau ha disputado 1.068 minutos, mientras que Fer Niño ha jugado 1.103. El primero no ha logrado aún perforar la portería rival, mientras que Fer Niño ha conseguido dos, en la jornada 1, en la victoria ante el FC Cartagena (3-1) y en la derrota contra el Real Oviedo (3-1). De este último gol han pasado más de dos meses (3 de noviembre).
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Esta escasez de goles se manifiesta en el registro global del equipo. En esta misma jornada de la temporada pasada los blanquinegros habían conseguido transformar 30 goles, mientras que en la actualidad tan solo suman 18 goles. Traspasado el ecuador de la competición, tan solo dos equipos han anotado menos goles que los blanquinegros, el Racing Club de Ferrol (14) y el Cartagena (15), ambos en puestos de descenso. El CD Tenerife, también en descenso, ha anotado los mismos goles que el Burgos.
Este curso, el Burgos CF se ha quedado en blanco en 10 de las 23 jornadas disputadas (además del partido de Copa ante el Marbella) y los 18 goles a favor se reparten entre ocho jugadores. A los dos tantos de Fer Niño hay que sumarle los seis de Curro, máximo goleador del equipo, cuatro de Álex Sancris, dos de Borja Sánchez y un gol cada uno de Lisandro, David López, Dani Ojeda e Íñigo Córdoba.
Retomada la solidez defensiva, ahora Luis Miguel Ramis necesita dar con la tecla del juego ofensivo. Encontrar el camino del gol es la pieza que le falta al equipo para dejar de mirar de reojo a los puestos de descenso y poder aspirar a más.
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