Los días pasan y el bloqueo institucional del Burgos CF continúa. Tras certificar sobre el césped del Francisco de la Hera de Almendralejo el ascenso deportivo a Segunda División, la entidad blanquinegra apura los plazos para recuperar la estabilidad económica e institucional exigida por ... La Liga para competir en la categoría de plata del fútbol español. Sin embargo, la situación se encuentra ahora mismo en un compás de espera.
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De hecho, el grupo empresarial burgalés liderado por Miguel Ángel Benavente que recuperó semanas atrás la mayoría de las acciones del club, aún no se ha reunido con Antonio Caselli, anterior propietario de las acciones, quien no se encuentra en España. Según confirman fuentes consultadas, Caselli emprendió días atrás un viaje a Turquía en busca de los recursos económicos suficientes como para sufragar todas las deudas que actualmente mantiene el club con jugadores, cuerpo técnico, empleados, proveedores, exjugadores y exentrenadores.
Unas deudas que, en caso de mantenerse a 30 de junio impedirán que el Burgos CF regrese de nuevo a la Segunda División. Así de hecho se lo han hecho saber al club los responsables de La Liga, que en las últimas jornadas han visitado en varias ocasiones la ciudad. La última visita tuvo lugar ayer mismo, cuando varios responsables de la competición volvieron a analizar El Plantío y se reunieron con el alcalde, Daniel de la Rosa.
Sin embargo, Caselli aún no ha vuelto a España. Inicialmente, se esperaba su regreso para principios de semana, pero esa fecha se ha postergado y, previsiblemente, no llegará a Burgos hasta finales de esta semana.
Y mientras tanto, el control ejecutivo del club sigue en manos de la familia Caselli, que insiste en su idea de recuperar el control accionarial y aún no ha convocado una Junta Extraordinaria de Accionistas a pesar de que el grupo de empresarios burgaleses, reunidos en torno a la sociedad Yucon Business, lo solicitó formalmente semanas atrás mediante un burofax.
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Es más, fuentes consultadas por este periódico confirman que días atrás se planteó la posibilidad de echar mano de un 'mediador' independiente entre el grupo empresarial burgalés y la familia Caselli. Una opcion que finalmente no ha fructificado.
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Con todo, y a pesar de no tener poder ejecutivo dentro del club, el grupo de empresarios burgaleses sigue trabajando en un segundo plano con el objetivo de conseguir que el Burgos CF cumpla todas las condiciones para jugar en Segunda División.
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En este sentido, se mantienen abiertos muchos frentes de trabajo, tanto en el ámbito institucional, buscando alternativas que permitan desbloquear el conflicto, como en el meramente deportivo.
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Ruth Rodero
Así, la primera opción del grupo liderado por Benavente es la continuidad de 'Michu' al frente de la Dirección deportiva del club, aunque su contrato finaliza este mes de junio. La idea es que, una vez desbloqueada la situación, se avance en la confección del proyecto deportivo, teniendo en cuenta que 14 futbolistas de la actual plantilla tienen contrato en vigor.
Sea como fuere, los próximos días se antojan cruciales, tanto en un sentido como en otro, y está previsto que se comience a resolver la situación. No en vano, el margen temporal es exiguo y los problemas son numerosos.
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