El Burgos CF vuelve a la senda de la victoria en El Sardinero

Calero y sus pupilos buscarán devolver la euforia aguada por la última derrota en El Plantío ante el Tenerife que dejó, a pesar del buen tiempo pese a las fechas, algo fríos a los aficionados blanquinegros tras tocar el techo de la Segunda División ante Las Palmas.

La agónica victoria copera frente a otro ilustre del fútbol español como el Recreativo de Huelva en el Nuevo Colombino tampoco terminó de levantar unos ánimos que sí se caldearon con la polémica en la gestión de las entradas por parte del club racinguista y la posterior declaración de partido de alto riesgo.

Precisamente esta circunstancia impedirá que sean más los seguidores del Burgos CF que completen uno de los grandes desplazamientos de la temporada. Pero si hay algo que destaca en Burgos es la devoción incondicional de la hinchada burgalesista, que aportará más de 2.000 gargantas a la causa para volver a tierras castellanas con los tres puntos.

Le hará falta el aliento al equipo burgalés para medirse a los de Guillermo Fernández Romo, que acumulan «siete porterías a cero en los últimos diez partidos», tal y como destacaba todo un experto en imbatibilidad como Calero en la rueda de prensa previa al partido.

Esa buena renta permite al cuadro blanquinegro permanecer en los primeros puestos de la tabla, tercero con 27 puntos que le permiten quedarse en una «fiesta» en la que el Burgos CF parece haber acampado tras «colarse» con su histórica racha en el inicio de campeonato.

Abonado al empate, resultado que ha repetido en cuatro ocasiones de los últimos cinco encuentros, el Racing de Santander regresa a los Campos de Sport de El Sardinero tras conquistar Andorra con un solitario tanto de Pol Moreno en el minuto 51.

Con esos tres puntos, el próximo rival del Burgos CF suma 18 en su casillero, cifra que lo aleja levemente de los puestos de descenso que ha habitado durante gran parte de este arranque liguero y le aúpa hasta la 15ª plaza de la tabla.

Son diez los goles que ha tenido que sacar de sus redes Miquel Parera, más del doble que el hombre récord Caro, por los ochos anotados este curso por los jugadores racinguistas, cuatro menos que los conseguidos por los burgaleses.

El gol es uno de los debes del cuadro cántabro este curso, que esta echando en falta la presencia de una de sus estrellas del ascenso, el nigeriano Cédric Omoigui, aquejado por una grave lesión en la columna que afecta al canal medular y le mantiene alejado del césped desde la cuarta jornada de liga.

La idea futbolística plasmada por el conjunto cántabro se asemeja al concepto patentado por el preparador madrileño a orillas del Arlanzón, con un juego basado en aprovechar el tiempo de posesión del equipo y cimentar una solidez defensiva que ahora sí parece palpable en la capital santanderina.

No en vano, el entrenador racinguista se ha desmarcado de este planteamiento alegando que su intención es «pasar el mayor tiempo posible con el balón y lo más lejos posible de su portería» y, al contrario que el técnico blanquinegro, piensa que «en el fútbol no hay muchas fases, solo hay una que es jugar».

Para desarrollar esa única fase, el Racing ha dispuesto de toda una semana de descanso al no disputar la primera ronda de la Copa del Rey por su condición de campeón de 1ª RFEF el año pasado.

Pese a ello, Calero aseguró que espera un partido «disputado» que el equipo afronta con «buena dinámica» tras recuperarse de la derrota. Tras haber «recuperado la ilusión de la ciudad por su equipo», el Burgos CF viajará a Santander para emular la última visita al Racing, que se saldó un 0-2 en un lejano septiembre de hace 21 años y permitió traer los tres puntos a El Plantío.

Todas las noticias de Burgos en BURGOSconecta