La protectora encargada de recoger los animales de Burgos vuelve a incumplir el contrato

Los animales, que se encontraban en una casa donde hace dos años ya se hizo una intervención, vivían en unas condiciones a todas luces insalubre. Voluntarios Animales Burgos se enteró de la situación de los canes por medio de una trabajadora social con la que ya han trabajado en ocasiones anteriores, pero tras hacerse cargo de diez perros procedentes de un rescate en una localidad cercana a la capital no podían recoger a más.

Sin refugio, dependiendo de casas de acogida y con una deuda en el veterinario, las voluntarias que gestionan la asociación indicaron, una vez más, a la trabajadora social que en esta ocasión debía ponerse en contacto con Scooby Medina y también con la Policía Local. Mientras tanto, consiguió que la persona responsable de los animales, ingresado en el hospital, cediese a los perros para su rescate.

La mujer, como le indicaron en la asociación burgalesa, dio aviso a la Policía Local de Burgos para que se procediese a avisar a Scooby. Era un viernes y transcurrió hasta el siguiente martes sin que desde la protectora diesen una respuesta. «La respuesta que daban es que no sabían cuándo iban a venir, cuando ese mismo martes habían estado en Burgos. Los animales estaban viviendo en un estercolero, entre azulejos y cristales rotos. Viviendo en la calle y con un señor amigo de su dueño que iba a llevarles comida de vez en cuando, aunque los animales están desnutridos», explican desde Voluntarios Animales Burgos.

En la desesperación por querer ayudar pero no poder hacerse cargo de todos los animales, desde la asociación burgalesa rescataron a una hembra a la que han llamado Aria que tuvo que ser ingresada en el veterinario pues llegó con espasmos y un grave estado de desnutrición y deshidratación. Estando en el lugar donde se encontraban los canes, junto a la trabajadora social que había alertado de la situación y la Policía Local, Voluntarios Animales Burgos llamaron a Scooby para «preguntar qué pasaba y por qué no habían ido todavía a por esos animales». «La respuesta fue que se estaban organizándose. Llevaban cinco días organizándolo, lo raro es que los perros estuviesen vivos aún. Les dije que tenía una cachorrilla que se estaba muriendo, que a qué veterinario la tenía que llevar en Burgos y me dijo: «Ay, no, no, déjame organizarme». No me quiso decir dónde la tenía que llevar y nos la llevamos a nuestro veterinario», cuenta Ana.

Además de llevarse a la cachorra que necesitaba asistencia veterinaria con urgencia, también sacaron a los cuatro cachorros restantes que quedaban con vida, pues uno había fallecido desde el primer aviso a Scooby esperando a que lo sacaran de allí. Las chicas de Voluntarios Animales Burgos se los llevaron a una residencia canina, al siguiente día, después de llamar al Ayuntamiento, a la concejala responsable del área y de insistir Scooby viajó hasta Burgos para hacerse cargo de los animales.

Pero no es esta la única denuncia de esta intervención. Entre los animales se encontraban tres mastines y una perra de presa. Al más grande ellos lo tuvieron que sedar, tres veces, para podérselo llevar «sin supervisión de un veterinario». «El perro no era fácil de coger, pero ahí tendría que haber estado el veterinario municipal, pero no hay, hace meses que no hay, y allí no fue ningún veterinario a ver en qué estado estaban esos animales para poder tramitar una incapacitación para ese señor. Y al perro le chutaron tres sedantes porque el primero se le cayó, el segundo no le durmió y le pusieron tres», lamentan desde la asociación.

Las reclamaciones por parte de Voluntarios Animales Burgos es la que llevan haciendo meses: «Si un animal necesita en Burgos asistencia veterinaria no la tiene, que si tienen que venir a hacer la recogida en dos (que es lo que marca el contrato) tardan cinco días y que en este caso se ha muerto un cachorro y no se han muerto diez perros de milagro».

Denuncias que conocen en el Ayuntamiento de Burgos, puesto que en el mes de julio ya sancionaron a Scooby con 5.800 euros por incumplir el contrato de recogida de animales de compañía y control de las colonias felinas. A fecha de 7 de julio, que es cuando el Ayuntamiento anunció estas sanciones, la protectora había cometido un total de doce infracciones, seis leves y seis graves, desde que se hicieran con el servicio el pasado 10 de marzo. BURGOSconecta ha intentado conocer la versión del Ayuntamiento respecto a las actuaciones denunciadas por Voluntarios Animales Burgos sin obtener respuesta.

Además, desde la asociación llevan tres meses reclamando poder ver a los animales de Burgos que están al cuidado de Scooby Medina. «Queremos ver a los que son de la perrera municipal de Burgos y no hemos conseguido que nos autoricen. Nos están dando largas. Han entrado un montón de perros de los que no conocemos su carácter, los estamos sacando a ciegas, pero necesitamos conocerlos para poder sacarlos antes de entregarlos a una familia. Se lo hemos pedido al Ayuntamiento de Burgos, a la protectora, y aquí solo nos dan largas. No quieren que entremos en sus instalaciones y nosotros queremos que, aunque sea, nos los saquen a la calle», insisten.