Callejeando por Burgos

La Plaza Mío Cid, cruce de caminos y crisol de la bravura del Campeador

En mitad de la plaza se levantó en 1955 el monumento a Rodrigo Díaz de Vivar. Apodado por los musulmanes, Sidi, el Cid Campeador. La escultura le fue encargada por el Ayuntamiento a Juan Cristóbal.

Sobre un soberbio Babieca, el 'Campisdoctor' levanta su Tizona al cielo de la ciudad, en el momento previo a la batalla o del destierro del burgalés de pro, repudiado por sus propios vecinos. Dice la Historia que su espada apunta hacia Valencia. Y en este punto se inicia la ruta cidiana en Burgos.

Babieca se sostiene en tres patas, un significado de las representaciones ecuestres que significa que el héroe murió como conscuencia de las heridas de una batalla; si el caballo descansa sobre dos patas, el significado hace referencia a que murió en plena pelea; y si lo hace sobre cuatro patas, que el su jinete murió de muerte natural.

Una ruta que sigue por el puente de San Pablo donde las ocho estatuas que lo flanquea representan a doña Jimena, la esposa de El Cid; su hijo Diego Rodríguez; San Sisebuto, abad del monasterio de San Pedro de Cardeña. Jerónimo de Peribot, obispo de Valencia; su amigo Martín Antolínez; Álvar Fáñez, sobrino; Martín Muñoz, conde de Coímbra. Y Ben Galbón, señor de Molina de Aragón.

Son obra del alavés de Fontecha Joaquín Lucarini, escultor que murió en 1969 en Burgos cuando llegó a la ciudad a rotular las estatuas.

La doble del pedestal reza, por lado: «El Campeador llevando consigo siempre la victoria, fve por sv nvnca fallida clarividencia, por la prvdente firmeza de sv caracter y por sv heroica bravvra, vn milagro de los grandes milagros del creador».

Y por el otro lado: «Año 1099: En España, dentro en Valencia mvrió el conde Rodrigo Diaz. Sv mverte cavsó el más grave dvelo en la cristiandad y gozo grande entre svs enemigos».

A la plaza de Mío Cid se accede desde la calle Santander, la calle Vitoria; desde el Espolón y paseo Per Abat; desde la avenida del Arlanzón y desde el puente de San Pablo desde la calle del mismo nombre, la plaza Conde Castro, calle Valladolid, paseo Sierra de Atapuerca y pasaje Emiliano Aguirre.