Las obras del aparcamiento del Silo, el Bulevar y Manuel Altolaguirre, inminentes

Tres de las actuaciones que mantiene en cartera el equipo de Gobierno en diferentes puntos de la ciudad están al caer. El Ayuntamiento de Burgos ha dado luz verde a los planes de seguridad y salud de las obras vinculadas a la construcción de un aparcamiento disuasorio en el Silo de Gamonal, a la prolongación del Bulevar Ferroviario y su conexión con la N-120 en la zona oeste de la ciudad y a la demolición de las antiguas naves de Manuel Altolaguirre.

A la vista del avance en los trámites administrativos, desde el equipo de Gobierno del Ayutnamiento de Burgos confían en que las tres intervenciones arranquen formalmente en los próximos días, probablemente la semana que viene.

Se trata de tres actuaciones de cierta envergadura. La primera, sostenida en un proyecto redactado durante el anterior mandato y adjudicado a Padecasa por 1,7 millón de euros, obtuvo el espaldarazo definitivo meses atrás con la cesión de la parcela por parte de la Junta de Castilla y León, que además financiará parte de la obra.

Allí, en el plazo de nueve meses, se habilitarán un total de 224 plazas de aparcamiento, incluidas ocho para personas con movilidad reducida, y se urbanizará todo el entorno. A mayores, el proyecto contempla también la creación de un pequeño tramo de carril bici destinado a conectar el futuro tramo de la avenida de la Constitución con el tramo de la calle Juan Ramón Jiménez.

La Junta también financiará parte de la construcción del nuevo tramo del Bulevar, la cual fue adjudicada semanas atrás a la UTE formada por las empresas Herrero Temiño y Asfaltia por un presupuesto cercano a los 2,9 millones de euros. La actuación pretende prolongar el actual Bulevar hasta su conexión con la N-120 a la altura del Barrio del Pilar en un plazo de 8 meses.

Por su parte, la demolición de las antiguas naves de la calle Manuel Altolaguirre fue adjudicada a Alpesa por un presupuesto de 454.421 euros (IVA incluido).

En este caso, el proyecto contempla, no sólo el derribo de las instalaciones abandonadas años atrás, sino también la urbanización de toda la parcela. La mitad de la misma se anexionará al actual aparcamiento de Las Torres, creando un centenar de nuevas plazas; la otra mitad se convertirá en un espacio verde a la espera de una posible cesión a la Junta de Castilla y León dada su cercanía al colegio Juan de Vallejo.

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