Los hoteles de Burgos afrontan el fin del ejercicio con buenas expectativas en general, al menos en términos de ocupación y facturación, aunque no tanto de rentabilidad.
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Y es que, tal y como expone Luis Mata, presidente de la patronal hotelera burgalesa, «el año ha ido bien» y se espera un buen mes de diciembre, pero el incremento de costes de explotación, sobre todo en el apartado de costes de personal, lastrará el rendimiento. Básicamente, se prevé facturar más, pero dichos ingresos extraordinarios se compensarán con el aumento de gastos, por lo que la rentabilidad se mantendrá plana en términos generales.
Evidentemente, la cosa va por barrios y cada establecimiento vive una realidad más o menos diferente, pero lo cierto es que hasta ahora, las fechas clave del calendario han respondido bien.
Así, por ejemplo, el pasado puente de Todos los Santos fue «muy potente» y cumplió las expectativas generadas. «En general, ese tipo de puentes funcionan muy bien cuando hace tiempo que no ha habido alguno», cosa que ha pasado este año, cuando el 12 de octubre cayó en fin de semana y no hubo puente.
Y con la vista puesta en el arreón de final de año, las expectativas son muy similares. Así, las reservas de cara al puente de la Constitución «van a buen ritmo». Tanto que desde la patronal confían en rozar -o alcanzar- el lleno durante las noches del viernes y el sábado, mientras que para el jueves se prevén ocupaciones de «alrededor del 70%» y para el domingo del «60%». Hay que tener en cuenta, en este sentido, que el lunes no es festivo en todo el territorio nacional.
Esa circunstancia, no obstante, no tiene por qué se mala para el sector en Burgos. No en vano, explica Mata, en la ciudad del Arlanzón funcionan mejor «los puentes cortos», ya que los largos habitualmente están asociados a otros destinos menos cercanos e incluso internacionales.
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Tampoco es Burgos un gran destino en Navidad, pero aún así son fechas que «funcionan bastante bien». En este caso, se trata de un «turismo más familiar» en el que el precio a menudo resulta clave.
Así, todo apunta a que la campaña de Navidad de este año será «similar» a la de 2023. De momento, afirma Mata, «hay un buen volumen de reservas», sobre todo durante los fines de semana y los días clave de las fiestas, pero todavía es pronto para dibujar previsiones concretas.
Eso sí, la patronal está continuamente pendiente de las cancelaciones, fundamentalmente las de última hora, que pueden echar al traste cualquier previsión. A este respecto, la meteorología resulta clave en una ciudad como Burgos y una época como esta.
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