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Las peñas de Burgos, a través de presidente de la Federación, Miguel Santamaría, Policía Local, Bomberos y el concejal de Medio Ambiente Carlos Niño, han explorado este lunes «posibles ubicaciones» para celebrar el Curpillos del año que viene «manteniendo el arraigo que tiene a la ... celebración religiosa», explicaba Santamaría.
Han «descartado algunos lugares, aunque es prematuro decir dónde se va a celebrar», apuntaba el presidente de la Federación de Peñas. La idea que barajan todos es que «no esté lejos de El Parral» porque la tradición manda. Y en este sentido «hay lugares cercanos donde podría hacerse», pero, «por cautela y porque no hay nada hecho» se ha abstenido de proponer espacios en la ciudad para celebrar la fiesta.
El cierre del parque de El Parral ha provocado un tsunami de reacciones en el ámbito de las peñas de Burgos. La tradicional jira, una tradición secular en la ciudad, no se va a poder celebrar en el emblemático espacio propiedad de Patrimonio Nacional. La causa: las obras que se van a realizar y que obligan a su cierre temporal.
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Un cierre que va a coincidir con la celebración del Curpillos. Si bien no afectará a los actos civiles, religiosos y militares de ese día, que será el 7 de junio de 2014, ya que los actos se celebran en el barrio de Huelgas y en el Monasterio, no ocurrirá lo mismo con el parque que se encuentra a 500 metros.
Desde la Federación de Peñas, su presidente Miguel Santamaría, entiende que la realidad no permitirá el uso del parque en 2024. Y que es necesario buscar un acuerdo para elegir el mejor sitio. Ha recordado que una de las fuentes «más importantes» con las que cuentan las peñas de Burgos para realizar sus actividades «sale del dinero que se saca en El Parral».
Como ya se anunció en su día, la intención del propietario de El Parral, tal y como recoge la web de Patrimonio Nacional, ha planificado la «recuperación medioambiental e histórica del parque». Esa actuación va a incluir la plantación de 407 árboles y 2.500 metros cuadrados de arbustos. Un proyecto que incluye la mejora también «del alumbrado y el pavimento». Además está prevista la instalación de cuatro cerramientos que permitan regular los horarios de apertura, tal y como ocurre en otros jardines de Patrimonio Nacional.
El plazo para la realización de las obras de recuperación del parque durará un año; y el de la mejora del perímetro y de colocación de puertas, de otro medio año. A juicio de Patrimonio Nacional, las obras son incompatibles con la realización de cualquier actividad, del tipo que sea.
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