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Calle Burgense. JCR
Callejeando por Burgos

La calle de Burgos que es todo un enigma

La calle Burgense está dedicada a uno de los más importantes personajes de la vida medieval burgalesa. Tampoco es fácil ubicarla pese a estar en el cogollo del entorno del Museo de la Evolución Humana

Miércoles, 19 de junio 2024, 06:58

Estar a la sombra del Museo de la Evolución Humana hoy; de un horroroso aparcamiento en superficie antes y de unos cuarteles mucho antes, hace que la calle del Burgense casi pase desapercibida para los burgaleses. Y, sin embargo, está dedicada a uno de los personajes más importantes de los siglos XIV y XV en la ciudad.

El nombre del Burgense se le atribuye a uno de los personajes más ilustres de la ciudad. Se trata de Pablo de Santa María, nacido en Burgos en 1350. Su verdadero nombre era Selemoh Ha Levi o Simeón Levita.

Pablo de Santa María nació en el seno de una ilustre familia judía de la tribu de Levy. Era judío en su nacimiento y, cuando tenía 40 años, se convirtió al cristianismo. Su obra literaria es abundante, sobre todo, en el campo de la teología y la controversia.

Llegó a ser obispo de Burgos y en ese tiempo ocupo cargos de relieve en la Corte y en la sociedad de Burgos. Se casó los 26 años, y fue padre de Alonso y Pedro de Cartagena.

Portando ya la mitra obispal intervino en la corte romana, mediando en el famoso Cisma de Occidente. Pero antes de llegar a tales privilegios, Pablo de Santa María pasó por diferentes órdenes en el reino de Castilla que tenía en Burgos y en los alrededores de su Catedral, su epicentro político.

Santa María fue nombrado primero arcediano de Treviño y después obispo de Burgos en 1415, a instancias de Enrique III, de cuyo hijo, el futuro Juan II, sería preceptor. Fue durante cuatro años delegado del papa para toda España y asistió al concilio de Constanza.

Murió los 85 años; fue enterrado en el convento de San Pablo y trasladados después sus restos a la Catedral, en 1860, donde reposa junto a su hijo, en la capilla de la Visitación.

A la calle Burgense se accede desde la calle Calera. Desde el pasaje Emiliano Aguirre, desde la calle de Santa Clara y desde la del Doctor Fleming. A esta calle dan las traseras del Museo de la Evolución Humana, del Centro de Investigación sobre la Evolución Humana y del Fórum.

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