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Tras un año de parón por la covid-19, la ciudad de Burgos ha vuelto a salir a la calle para celebrar su patrón, San Lesmes. El sol tampoco ha querido faltar a la cita. Con el desfile de la comitiva desde el paseo del ... Espolón hasta la iglesia de San Lesmes han comenzado los actos oficiales.
Danzas, atuendos tradicionales, los Gigantillos y el reparto de panecillos. La plaza de San Juan ha vuelto a ser tomada por la celebración del patrono de Burgos. Tras la misa, se ha comenzado con el reparto de panecillos y productos típicos de la tierra en la plaza de San Juan. Unos panecillos que son una costumbre en la ciudad y que guardan relación con el santo. La costumbre se remonta muchos años atrás. Se dice que el santo no dudaba en alimentar a los pobres, peregrinos y enfermos. Procuraba disponer de suficiente pan para que no le faltase a nadie, de ahí que se pensara que el monje hacía milagros con el pan.
Los burgaleses comenzaron a llevar pan a la iglesia de San Lesmes para que se bendijera. El pan se guardaba en casa para contar con la gracia de Dios. Actualmente, la hermandad Adelmus vende estos panecillos como una forma de obtener ingresos para sus actividades. Los bendicen primero y después de la misa se venden. Dulces y salados, las colas eran largas para volver a saborear este pan tan típicamente burgalés.
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Aythami Pérez Miguel
No faltaron los bailes de los grupos folclóricos y ese solemne y siempre esperado baile de los Gigantillos. El sonido de las dulzainas era la banda sonora que acompañaba a los burgaleses y visitantes por las calles de la ciudad esta mañana. A ellos se ha sumado la corporación municipal, que siempre cierra el desfile de la comitiva.
Este año, en plena campaña electoral para elegir a los procuradores de las Cortes de Castilla y León y al presidente de la Junta, se han dejado ver por la celebración caras políticas.
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La jornada más puramente burgalesa no acaba con los actos por la celebración del patrón de la ciudad. Las celebraciones continúan el próximo fin de semana, con un homenaje al fundador de la ciudad de Burgos, Diego Rodríguez Porcelos, así como a las víctimas de la covid-19. Este evento tendrá lugar el sábado, 5 de febrero, a las 13.30 horas en la plaza Santa Teresa. Al día siguiente se celebrará la llamada misa de Acción de Gracias en la iglesia de San Lesmes y, posteriormente, en el Monasterio de San Juan, tendrá lugar la entrega del Báculo de Oro al Cabildo Catedralicio. Un reconocimiento con motivo de la celebración del octavo centenario de la Seo burgalesa y con el que la Federación de Peñas y Asociaciones de San Lesmes busca poner en valor al Cabildo.
Natural del pueblo francés de Loudun, San Lesmes Abad llegó a Burgos en el siglo XI como parte del séquito del rey Alfonso VI. Aquí fundó el monasterio de San Juan Evangelista.
El monje alcanzó renombre por su labor social con peregrinos y los ciudadanos burgaleses más necesitados. Pero, además, desarrolló un papel importante en el saneamiento urbano gracias a sus conocimientos de ingeniería, llegando a asesorar al concejo municipal sobre la desecación de zonas pantanosas e insalubres.
Así, los burgaleses le escogieron como patrono. El domingo más cercano al día 30 de enero se llevan a cabo celebraciones en homenaje a su figura.
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