Secciones
Servicios
Destacamos
Sara Sendino
Martes, 1 de agosto 2023, 13:57
La situación de Protección Civil en Burgos es insostenible. Los voluntarios llevan de «baja voluntaria» desde abril debido a numerosas discrepancias con el anterior equipo de Gobierno. Por el momento, el nuevo pacto PP-Vox tampoco ha logrado arreglar este conflicto, por lo que el ... concejal de Seguridad Ciudadana, Ignacio Peña, ha lanzado un ultimátum a la asociación para que la colaboración entre ellos y el Ayuntamiento se recupere.
Peña ha aludido a que se ha reunido con ellos «en diversas ocasiones» y que la relación ha sido buena. Sin embargo, reitera que «ellos están enrocados en una serie de promesas que se les realizó por parte del anterior equipo de Gobierno», que considera «inasumibles». «Fundamentalmente ellos querían imponer un técnico» que les dirigiera, pero Peña y su partido no están de acuerdo. «Entendemos que una agrupación de voluntarios no puede imponer su voluntad y la persona que ha de dirigirles», ha esgrimido el concejal en una rueda de prensa.
Por parte de Peña, el concejal ha reiterado que «se ha intentado llegar a un acuerdo» con Protección Civil y que él mismo les ha «animado enérgicamente a que volviesen a sus labores». Sin embargo, habla de que el «problema fundamental» del dirigente le «parecía un chantaje», por ese motivo ha decidido proponerles un ultimátum.
«Ha llegado el momento que me ha hecho tomar una decisión y pedirles que por favor tomasen una decisión firme», ha señalado. Las opciones eran «que volviesen a ejercer sus funciones» porque si no, a Peña, no le queda «otro remedio que pedirles que den un paso atrás para poder relanzar la agrupación».
El concejal considera que es «una situación enquistada, que no va a avanzar y que se va a prolongar en el tiempo durante meses». Ha indicado que es «vital» no esperar más tiempo y que su propósito es que los voluntarios «vuelvan», aunque su «negativa ha sido tan radical» en la imposición del responsable que querían que Peña ha pedido a los que no estén de acuerdo que abandonen la misma. Su baja, solicitada en abril, duraría seis meses, por lo que si no se reincorporan a sus labores, su pertenencia acabaría en octubre.
Asimismo, el concejal de Seguridad Ciudadana pide a los voluntarios una respuesta «de la forma más inmediata posible», porque si no vuelve el número suficiente de voluntarios «como para poder continuar la labor actual, tenemos que empezar a trabajar» prácticamente desde cero. Ha aludido que «el tiempo es fundamental» y que están «a la espera».
Por otro lado, Peña ha alabado las actuaciones de Protección Civil, que prestaba «un servicio de calidad envidiado por otras provincias». Ha calificado la agrupación como «de referencia». Sin embargo, si los voluntarios no vuelven, el concejal ha propuesto relanzar la agrupación «cuanto antes».
«Es el momento y bienvenidos sean», ha comentado acerca de las personas que se quieran unir a Protección Civil. Actualmente, la asociación cuenta con 41 voluntarios y, de ellos, cuatro no se dieron de baja en ningún momento y tres ya han vuelto a sus funciones, pero son insuficientes para «prestar servicio».
Noticias relacionadas
Para formar parte de Protección Civil, el concejal ha hecho un llamamiento a personas con «voluntad y ganas». Además, los postulantes deben pasar un proceso de formación que debe superarse, y que incluye conceptos en el ámbito sanitario y de seguridad.
Asimismo, el concejal ha recalcado que, desde que dejaron de colaborar con el Ayuntamiento de Burgos, la falta de Protección Civil también ha tenido una repercusión económica para el Consistorio, ya que en Sampedros, por ejemplo, no operaron y se tuvo que contratar seguridad privada.
Desde el nuevo equipo de Gobierno han asegurado que «se ha tomado muy en serio» el tema de solventar el local de Protección Civil. Unas instalaciones con «graves deficiencias» que el anterior Gobierno iba a subsanar con un nuevo espacio en una nueva ubicación y por un presupuesto de 3,3 millones de euros, según ha relatado Ignacio Peña.
La solución del nuevo concejal, sin embargo, es distinta. Ellos pretenden «plantear una posible reforma del edificio» que creen que «puede ser mucho más barato». De esta forma, pretenden dar uso a este local y no abandonar«otro edificio municipal en una zona céntrica de la ciudad», dado que se sitúa en la calle Juan Bravo, cerca del centro de salud Los Comuneros.
«La propuesta sería una reforma integral», ha propuesto Peña, que ha asegurado que «todo es hacer números y, en un plazo prudencial, se tomará una decisión». Los planes del concejal contemplan que la parte de abajo sea zona de aparcamiento y que las instalaciones adiministrativas se sitúen en la parte de arriba, que está «en desuso total». Sin embargo, ha admitido que, por parte de los voluntarios, hay opiniones acerca de la reforma «para todos los gustos».
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La proteína clave para la pérdida de grasa
El Comercio
25 artistas para descubrir y disfrutar en 2025
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.