El sector Centro-Gamonal, bajo la lupa por repunte de la covid en las aguas residuales

«Ha quedado demostrado que los análisis de aguas residuales son eficaces para monitorizar el virus», insiste el concejal delegado de Aguas de Burgos, Miguel Balbás, quien ha presentado los resultados de los análisis realizados. Y, en ellos, se ven reflejados los repuntes de la covid, en la segunda pero también la tercera ola, o los aumentos de los casos que han dado lugar a sendos cribados selectivos en los centros de salud Comuneros y Los Cubos, este último activo hasta el martes.

Los peores registros en la ciudad, hasta la fecha, corresponden a los estudios realizados el 18 de noviembre y el 9 de diciembre, días en los que se tomaron las muestras en la red de alcantarillado de la ciudad. Entonces, se detectaron 18,2 y 19 millones de unidades genómicas por litro de agua (la unidad que se utiliza para medir la presencia de la covid-19), de media, entre los cuatro sectores en los que se ha dividido Burgos para el proyecto: Fuentecillas, Zona Sur, Huelgas y Centro-Gamonal (este último aglutina al 70% de la población y está subdividido en seis sectores).

A partir del 9 de diciembre se suspendieron los análisis, ante la finalización del contrato menor con Aguas de Valencia, pero se retomaron el 12 de enero. Ya en 2020, el registro más alto corresponde al 19 de enero, con 9,5 millones de unidades genómicas, y una semana más tarde la incidencia acumulada en la ciudad alcanzaba el pico más elevado de la tercera ola: 631,4 casos por 100.000 habitantes a catorce días el 28 de enero, tras tres jornadas de 620 casos.

Desde entonces, las aguas residuales muestran una tendencia a la baja en la presencia de la covid-19, con un registro de 2,1 millones de unidades genómicas en los análisis del 10 de febrero, los últimos en realizarse y la cifra más baja de la serie histórica. Eso sí, Miguel Balbás ha indicado que se ha detectado un repunte, «que puede ser llamativo», en el sector Centro-Gamonal, que se deberá de confirmar con los análisis de esta semana. Y es llamativo porque el propio Balbás reconoce que esperaba niveles más bajos.

Y es que los registros han estado en descenso en ese sector desde el pasado 9 de diciembre, con una caída destacada en los análisis del 2 de febrero (1,1 millones), pero ahora ha repuntado a 3,2 millones. En especial, Balbás pone el foco en los subsectores Avenida de Castilla y León hasta Villafría y Lavaderos- Reyes Católicos-Plaza España, han registrado unas incidencias más altas de lo habitual, y que «ya están comunicadas», ha afirmado el concejal, para vigilar.

Por lo demás, el Miguel Balbás afirma que se está registrando una baja de la carga viral detectada en las aguas residuales de Burgos, que coincide con la propia evolución a la baja de la incidencia acumulada. De nuevo, el edil insiste en que los estudios (que mantendrán durante un año gracias a la contratación de la empresa Labaqua, que se encargará del proyecto por 110.000 euros) han permitido tomar decisiones anticipadas para frenar rebrotes, como en el caso del cribado selectivo de Los Cubos.

En el sector de Fuentecillas, al que atiende el centro de salud, se detectaron repuntes en los análisis del 25 de enero y 2 de febrero, con registros de 5,2 millones y 7,3 millones, respectivamente. Por ese motivo, entre otros, se tomó la decisión de realizar un cribado, que comenzó el pasado miércoles y finaliza este martes. En el análisis de la pasada semana ya se regristró menor presencia del virus en las aguas residuales, con registros en torno a las 800.000 unidades genómicas.

Miguel Balbás apunta que la información que ofecen las aguas residuales sirve de complemento a otro tipo de registros que maneja Atención Primaria. Así, por ejemplo, hace un par de semanas, se detectaron repuntes en la Zona Sur, que en principio no eran sospechosos, lo que luego se confirmó por los estudios posteriores. De no haber sido así, se hubiera dispuesto de información anticipada para haber tomado decisiones que ayudasen a contener la expansión del virus, insiste el edil.