Las aguas residuales delatan a la covid en Burgos, con el doble de registros que a mediados de octubre

De la mano de Aguas de Valencia, la empresa municipal viene analizando las aguas residuales de la ciudad desde finales del verano. Cada semana se toman muestras de la red de alcantarillado, que se ha dividio en cuatro sectores para los análisis. Así, se estudia la presencia del virus en las zonas de Fuentecillas, Las Huelgas, Zona Sur y Centro-Gamonal. Es lo se denomina estudio de nivel 1. También se hace un estudio de nivel 0, directamente en las aguas del Río Arlanzón.

Y como el sector Centro-Gamonal recoge al 70% de la población burgalesa, se ha decidido subdividirlo en seis sectores: El Plantío-Polígono de Gamonal, Gamonal hasta Lavaderos, Lavaderos-Reyes Católicos, Reyes Católicos-Avenida de Cantabria, Avenida de Castilla y León hasta Villafría y Calzadas-San Juan. Y con toda la información que se recoge se tiene una visión clara de la incidencia de la covid-19, incluso anticipándose a otros registros sanitarios o no sanitarios.

Por el momento, el escaso número de semanas de estudio impide hacer grandes predicciones a futuro, pero sí que permite ver que la incidencia actual del virus se había detectado días atrás en las aguas residuales. De mediados de octubre hasta el 3 de noviembre (últimos análisis realizados pues la toma de muestras de esta semana se ha tenido que suspender al estar el personal encargado en cuarentena por un positivo covid, ironías del destino) se han duplicado los registros del virus en Burgos.

El 13 de octubre se habían registrado, como media de los rastreos de nivel 1 en los cuatro sectores, 3.531.482 unidades genómicas por litro de agua. Sin embargo, el 3 de noviembre se había elevado la cantidad a 7.517.369. En todos los sectores y subsectores analizados se replica esta tendencia, aunque algunos como Fuentecillas, Lavaderos-Reyes Católicos y Avenida de Castilla y León hasta Villafría presentan incrementos mayores. Se sextuplican los registros en Fuentecillas, quintuplican en la Avenida de Castilla y León-Villafría y en Lavaderos-Reyes Católicos pasan de 707.873 a más de 28,7 millones.

El concejal delegado de Aguas de Burgos, Miguel Balbás, indica que más importante que la cifra global, que puede variar en función de si la muestra se toma más o menos cerca del foco del contagio, es la tendencia que marca. Y, en este caso, es una clara tendencia al alza que se confirma cuando se analizan los registros de las once zonas básicas de salud de la ciudad, que superan con creces los 1.000 casos por 100.000 habitantes (incluso algunas rompen al barrera de los 2.000).

Los registros más elevados del último informe se encuentran en la zona de Calzadas-San Juan (más de 44,6 millones de unidades genómicas por litro), donde se concentra hostelería y oficinas, lo que también influye en los resultados, apunta Balbás. Le sigue la zona de Lavaderos-Reyes Católicos, con 28,7 millones, mientras que son 11,4 millones en Gamonal hasta Lavaderos, 6,8 en El Plantío-Polígono de Gamonal, 3,9 en Reyes Católicos-Avenida de Cantabria y 3,4 en Avenida de Castilla y León-Villafría.

La media en el sector Centro-Gamonal es de 12,7 millones de unidades genómicas por litro, frente a las escasamente 7 que se registraban el 13 de octubre. En la Zona Sur se han detectado 10 millones, el doble que a mediados del pasado mes, y también se duplican los registros en Las Huelgas, con 3,8 millones. Mientras, en Fuentecillas (que incluye también la Barriada San Juan Bautista) son 3,3 millones pero el informe del 13 de octubre recogía apenas 625.000.

Miguel Balbás insiste en que, con los primeros datos recogidos, se puede decir que los estudios de las aguas residuales podrían funcionar como herramientas anticipatorias. Se trata de contar con un instrumento en preventivo para que, cuando se detecte un aumento de los registros de rastro de covid-19 en las aguas residuales en una determinada zona, se puedan poner en marcha mecanismos de control y restricciones que ayuden a frenar los contagios, incluso antes de que se acumulen los positivos.

Aguas de Burgos va a continuar realizando los estudios, como mínimo, durante seis meses más. Ahora se mantiene el servicio con un contrato menor, que finalizará a primeros de diciembre. Sin embargo, ya se está trabajando para sacar un concurso para contratar los rastreos durante seis meses. Balbás aboga incluso por ir más lejos, hasta el año, pero habrá que ir viendo cómo evoluciona la pandemia.

Ahora, cada análisis viene a costar 1.800 euros a la semana, a razón de 180 euros por cada una de las 10 muestras finales que la empresa presenta a Aguas de Burgos. Desde Aguas de Valencia toman muestras de diferentes puntos de la red de alcantarillado en cada uno de los sectores, que luego unifican para presentar una única muestra por sector, de modo que se dispone información variada de cada sector estudiado.