La Policía de Distrito empieza a patrullar en marzo ante la inquietud de la plantilla

El acuerdo cerrado entre el equipo de Gobierno y los sindicatos el pasado año da respaldo a la reestructuración. Sin embargo, lo que genera inquietud son los movimientos que se derivan, el traspaso de agentes de unas unidades a otras para dotar de personal a las nuevas. Un traspaso que supone un cambio de condiciones laborales y, en algunos casos, de horarios.

«Se está trabajando en ello» durante estos días, apuntan fuentes sindicales, que indican que la intención es poder aplicar el acuerdo desde el 1 de marzo. Sería entonces cuando empezarían a funcionar las nuevas unidades, como la Policía de Distrito, la medioambiental o la Unidad de Respuesta Rápida. También quedarían redefinidas unidades ya en marcha, como la de drones o VioGén.

Para dotar de personal a las nuevas unidades (solo para la Policía de Distrito se necesitan 39 agentes y 4 oficiales y para la medioambiental, entre 4 y 6 agentes) se va a plantear una movilidad provisional. El decreto de movilidad, que rige la asignación de policías a plazas y las opciones de traslados, está en fase de renovación. El actual está desfasado, tiene fallos jurídicos y no se aplica.

La intención es poder disponer de un nuevo decreto para finales de año, apuntan fuentes sindicales, pero mientras tanto se aplicará esa movilidad provisional, que servirá también para testar la nueva organización. Una movilidad que, más allá de los voluntarios, se rige por las normas clásicas: antigüedad y escalafón. Y eso está generando cierto malestar entre la plantilla.

Una de las principales razones es que algunas unidades, como la Policía de Distrito, suponen un cambio en la forma de trabajar. Ahora los turnos son casi uniformes: se trabaja una semana, se libra otra y se hacen refuerzos en la semana que se libra. Sin embargo, la Policía de Distrito supondrá trabajar de lunes a viernes, en turno solo de mañana y tarde, más algunos fines de semana y algún festivo.

Por ese motivo, también hay mucha expectación por ver cómo funcionará la nueva organización estos primeros meses. Y cómo se adaptarán los agentes. Los sindicatos son conscientes de que tienen que estar atentos, por si hay que realizar ajustes y modificaciones, pero también defienden que la reestructuración será positiva, pues se reforzará la presencia policial allí donde se necesita.

Será el caso de la Policía de Distrito, que patrullará las calles a pie, en moto y en coche. Es una policía de proximidad, que estará a pie de calle en los momentos en los que más se necesita. También con la Unidad de Respuesta Rápida, con una especialización en protección ciudadana. O la Policía Medioambiental, para reforzar la persecución de ese tipo de delitos.

La reorganización apuesta por la modernización del cuerpo, de ahí que se haya impulsado una unidad de drones o de investigación y reconstrucción de accidentes (esta última, un referente nacional como es la unidad canina). La Unidad de Diversidad y VioGén, ya en marcha, se va a acabar de definir a partir de marzo, una muestra de atención a las nuevas necesidades de la sociedad.