Pedirán a Patrimonio ampliar la zona de actuación para estabilizar el talud de Las Murallas

Así, se va a atender a los informes elaborados por los técnicos de Vías Públicas y los Bomberos de Burgos, que recomendaban actuar en una zona amplia para dar estabilidad a la ladera, y no únicamente reparar los desperfectos ocasionados por el desprendimiento. La solución ya se planteó días después del suceso, junto con otras propuestas, y ahora se ha tomado la decisión definitiva.

Se pretende retirar tierra entre 10 y 15 metros a cada lado de la zona del desprendimiento, explica el concejal de Vías Públicas, Miguel Balbás. Sin embargo, lo que sobre el papel parece sencillo, no lo es tanto, insiste. Y es que es necesario que la intervención pase por la Comisión Territorial de Patrimonio de la Junta, para conseguir la correspondiente autorización.

Y así se va a hacer. El Ayuntamiento tramitará la petición a Patrimonio, en «aras de la seguridad», pues igual que se desprendió parte de la ladera en agosto, con la gran sequía que sufrimos, puede haber más caídas. Y para que se agilice la tramitación, se presentará un proyecto, a modo de memoria breve que justifique la intervención, y un estudio geotécnico.

El área de Vías Públicas está trabajando en ello, y en las próximas semanas se concretará el procedimiento. El proyecto se redactará con el apoyo del informe de los Bomberos de Burgos, mientras que el estudio se gestionará desde la propia área municipal. Hay que determinar cómo retirar la tierra, en qué zonas y cómo estabilizar toda la ladera para asegurarla.

Actualmente, la tierra desprendida ya se ha retirado y la calzada está libre de materiales. Además, en la parte superior del talud se ha cerrado el paso, y se ha limpiado la maleza y retirado todos los elementos que pudieran ser susceptibles de caer. Se ha dado estabilidad al talud para que, en ese punto concreto, no haya más caídas, pero se requiere de una actuación más profunda.

Mientras, se está a la espera del informe de Tráfico sobre la posibilidad de cerrar de manera definitiva la calle Las Murallas. Los técnicos tienen que valorar si es viable, aunque en principio existen vías alterantivas para mantener comunicada la zona y dejar esa calle peatonal, solo permitiendo el acceso a los vecinos. Son ellos, precisamente, los que llevan tiempo pidiendo esta solución.

Por otra parte, el equipo encabezado por la arqueóloga Fabiola Monzón continúa analizando los restos hallados tras los desprendimientos. Fueron muchos los materiales recogidos, recuerda la arqueóloga, y ahora toca limpiarlos, catalogarlos, inventariarlos y estudiarlos. Es un trabajo delicado pero el informe con las conclusiones estará preparado este mismo año.

Monzón recuerda que se encontró, sobre todo, mucha cerámica. También algunas monedas, objetos y huesos, pero la mayoría son de animales. Cierto es que, en un primer momento, se habló de huesos humanos, y se vincularon a la Guerra de la Independencia, pero por ahora solo se han analizado restos de fauna, aunque tampoco sería extraño que pudiera aparecer alguno humano.

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