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El Plan Director de la Muralla, cuya primera fase se acaba de entregar, fijará prioridades de intervención para recuperar, consolidar y conservar esté Bien de Interés Cultural (BIC) de Burgos que no siempre ha sido tratado con el esmero que requiere. Y una de esas ... prioridades será, sin duda alguna, la consolidación del Arco de San Martín, inmerso ahora en plenas obras de peatonalización.
El arco mudéjar, una de las puertas de entrada a la ciudad medieval que todavía sigue en pie, presenta un «estado de conservación muy malo», ha admitido el concejal de Urbanismo, Daniel Garabito. Se sabía, pues los expertos en patrimonio llevaban años reclamando el cierre al tráfico para proteger el monumento, pues se estaba deteriorando rápidamente.
Sin embargo, con las obras de peatonalización, que comenzaron a mediados de agosto, ese deterioro ha quedado en evidencia. «La piedra se disgrega con sencillez», ha afirmado Garabito, lo que ha obligado a realizar un refuerzo, lo que se denomina técnicamente «encamisado». Eso sí, todo bajo la supervisión de los técnicos de Patrimonio de la Junta y el equipo redactor del Plan Director.
Además, se ha constatado que el lienzo anexo al arco tampoco está en buen estado, así que el Plan Director marcará como prioritaria la consolidación de ambos elementos. Daniel Garabito reconoce que no es este punto de la Muralla el único que requiere de una intervención, y por eseo será el plan el que determine la urgencia y, conforme a su valoración, se deberán ir desarrollando proyectos.
Por otra parte, se han realizado catas arqueológicas que están dando algunos resultados interesantes. Por ejemplo, se ha comprobado que los cubos del arco no son los originales, sino que son reconstrucciones posteriores pues en su momento lo que había era un cubo cuadrado. De este modo, las obras de peatonalización también están ayudando a descubrir la forma original de la muralla.
El concejal de Urbanismo ha acompañado al alcalde, Daniel de la Rosa, en su visita a las obras, que suponen una inversión de 765.000 euros y tendrán que estar finalizadas en abril del próximo año. Se trata de cerrar definitivamente al tráfico el arco, de modo que el paso bajo el mismo sea íntegramente peatonal. También la conexión con Francisco Salinas.
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Patricia Carro
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Gabriel de la Iglesia
Luego, el último tramo de Fernán González frente al Solar del Cid, la bajada a Santa Águeda y las entradas a las calles Las Murallas y Emperador serán viarios de coexistencia, que permitirán el paso de tráfico pero con prioridad para peatones. La obra va a permitir, igualmente, suavizar la curva del Paseo de los Cubos, que dificultaba el giro a los autobueses de gran tamaño.
La intervención se completará con la creación de una ciclocalle, desde Fernán González hasta el Parque delos Ochos en el barrio de Fuentecillas, de modo que se permitirá el paso de ciclistas también bajo el arco. El alcalde ha recordado que el proyecto permitirá crear zonas verdes y renovar toda la obra civil, alumbrado y canalizaciones. También se colocarán señales del Camino de Santiago.
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