Las zonas básicas de salud de Burgos sin positivos aplauden el toque de queda

A estas áreas hay que añadir la del Condado de Treviño, que, con cero casos en sus municipios, ya ha solicitado depender de Álava para no ir de la mano con las decisiones de la Junta.

Y es que la España vaciada echa una mano a estas limitaciones de movilidad, al permanecer menos habitantes en núcleos rurales. «No nos hace falta toque de queda, cuando llegan las 22:00 horas ya no hay nadie en la calle. El toque de queda lo tenemos todos los días. Como mucho puede salir la gente hasta las 21:30 horas a tomarse un aperitivo y para casa. Estas limitaciones las tenemos de continuo», apunta el alcalde de Valle de Losa, Juan Antonio Gutiérrez.

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Más contundente se muestra Igor Herrán, regidor de Sedano. «Está bien porque viene mucha gente a sus segundas residencias. Sería muy complejo que unos tuvieran limitaciones y otros, no, aunque nos moleste», recalca Herrán, que incide en la importancia de frenar el avance de la covid-19. «Esto hay que atajarlo de alguna manera y lo mejor es que a las 22:00 horas estemos todos en casa. Esperemos que surja efecto. No tenemos ningún caso a día de hoy, pero quién nos dice que mañana no tengamos tres o cuatro contagios», prosigue.

Aunque los cero contagios ondeen en estas cuatro zonas básicas de salud de Burgos, la prudencia sigue vigente en sus municipios. «Igual es una lotería estar bien. En el centro de salud, aunque están contentos, son muy precavidos. En verano, en los pueblos, las noches suelen ser distintas a las de invierno. Este domingo, por ejemplo, ha estado todo el día lloviendo. Apetece menos reunirse», recalca el alcalde de Villadiego, Ángel Carretón.

Y es que estas medidas entre junio y septiembre hubieran acabado con muchos quebraderos de cabeza de los regidores, que han tenido que luchar contra reuniones y botellones por la noche. «Es una medida, que según las cifras a nivel nacional, puede contribuir. Esta circunstancia en verano nos hubiera venido mejor. En esas mismas horas, había botellones y era muy difícil controlarlos. Nos enterábamos cuando alguien veía restos de basura. Ahora, los pueblos están más tranquilos», describe la regidora del Valle de Tobalina, Raquel González, que espera un control más exhaustivo para los próximos puentes festivos. «El riesgo lo veo para el fin de semana de Todos los Santos y el puente de diciembre», concluye.