Las residencias de Burgos mantienen en aislamiento a 133 usuarios, 106 más que al finalizar el estado de alarma

Hay que retrotraerse hasta el mes de mayo para encontrar una cifra tan elevada de personas aisladas en residencias por presentar síntomas compatibles con el virus o de forma preventiva.Hace justo un mes tan solo 23 usuarios de estas residencias permanecían en esta situación, ninguno de ellos con síntomas. Ahora, según la última actualización del Portal de Transparencia de la Junta, se encuentran en cuarentena preventiva sin síntomas 117 personas y 23 con sintomatología compatible con la covid.

Unas cifras que han llevado a la consejería de Familia y Servicios Sociales a reunirse telemáticamente con el Ministerio para concretar una hoja de ruta. Este lunes la consejera, María Isabel Blanco, solicitaba al Gobierno más medios económicos para poder acometer las acciones requeridas para frenar la expansión del virus en estos centros. Reconocía que uno de los vectores de contagio son los propios trabajadores y que las necesidades que impone la crisis sanitaria hacen necesaria una mayor inversión.

Por otro lado, si al finalizar el estado de alarma eran 1.019 los usuarios de residencias con la covid confirmada, ahora la cifra asciende a 1.077. 58 personas se han contagiado desde el 23 de junio. La buena noticia es que ya son 1.033 residentes los que han superado la enfermedad, 22 más que en la misma semana de julio y 24 más que en junio.

El número de fallecidos en las residencias permanece estable respecto al final de estado de alarma. Según los últimos datos facilitados por el gobierno regional, los decesos por covid confirmado suman 173, solo uno más que el 23 de junio. En cuanto a los fallecimientos con síntomas compatibles pero sin confirmar la presencia del virus, son 109, los mismos que dos meses atrás.

Esto quiere decir queel porcentaje de personas fallecidas respecto al número de contagios es del 16%. Cuando finalizó la emergencia sanitaria en el conjunto del país, en los centros de personas asistidas o de la tercera edad de Burgos el porcentaje era cerca de un punto más alto, con un 16,8% de fallecimientos respecto al total de casos confirmados.

La Junta de Castilla y León ha extremado las medidas higiénico-sanitarias en sus residencias, actualizando el protocolo de seguridad el pasado 19 de agosto para blindar sus centros frente a la covid. Entre otras, incluye que se deben realizar pruebas PCR a todos los empleados que regresen de permisos y vacaciones y a los nuevos trabajadores que se incorporen al centro. Además, recomienda realizar test a los empleados periódicamente para detectar cuanto antes un posible caso.

También estructura los centros por zonas en función de si hay o no personas infectadas y establece unos criterios de actuación y vigilancia diferentes en función de cada área. Respecto a la aparición o sospecha de aparición de un brote, la normativa de la Junta determina que, ante la sospecha o detección de un foco en un centro residencial, se cerrará de forma automática el centro a las visitas y salidas al exterior de los residentes, en tanto el brote no se considere epidemiológicamente controlado por parte de la autoridad competente.

Todo ello con la intención de evitar que la covid se propague entre la población que más riesgo corre de enfermar a causa de este virus. Por el momento en la provincia solo hay un brote declarado en una residencia, la de Vadocondes que, con 44 positivos, permanece controlado según las autoridades.