La pandemia quintuplica la recogida de residuos sanitarios en Burgos

«En la Gerencia de Atención Primaria no se factura por kilos generados, sino por el número de recogidas que se hacen en los centros de salud, servicios de urgencias, en los puntos específicos de realización de pruebas PCR/antígenos y en los puntos de vacunación habituales», detalla Honorato García, director de gestión de Atención Primaria.

De esta forma, los protocolos poco han variado y los residuos se recogen según las programaciones establecidas (en los centros urbanos generalmente dos veces por semana) y a demanda de las necesidades reales. Según la empresa ONET, que gestiona y recoge los residuos sanitarios, informa a título orientativo que se han recolectado a nivel general en los centros de Sacyl cinco veces más residuos sanitarios desde febrero de 2020 en la provincia de Burgos.

Además de implementar más recogidas, poco ha variado el funcionamiento en el día a día de completar el ciclo de los desechos. Ni con la vacunación. «Las agujas y los viales se depositan en los contenedores especiales habilitados para ellos, siguiendo las medidas de seguridad indicadas en el documento de vacunación covid-19. No hay ningún riesgo», detalla García, que desconoce el impacto medioambiental del incremento de residuos sanitarios.

Una vez empleado el material, los equipos de protección individual se introducen en un mismo contenedor, mientras que los objetos punzantes se establecen en otro. A partir de ahí, ese material se traslada hasta una planta de tratamiento en Medina del Campo. En esas instalaciones se esteriliza todo el material (se hierve todo a 150º, aunque la covid se destruye con 60º) para después triturarlo y enterrarlo.