«La incidencia de las cefaleas y la migraña se ha disparado durante el confinamiento»

Una de las causas más plausibles es que sean de origen «tensional». «Posiblemente la migraña tenga un componente familiar, genético, hereditario latente y se hayan puesto más de manifiesto en esta situación, mientras que las cefaleas tensionales, que es el otro gran grupo de las cefaleas, se han disparado», explica el doctor.

El estado de estrés y de tensión nerviosa al que muchos se han visto sometidos durante el confinamiento y los trastornos del sueño han sido el caldo de cultivo perfecto para este incremento exponencial. «La gente se ha angustiado mucho y ahora que se han abierto las consultas hay mucha demanda por cefaleas tensionales. La incidencia de las cefaleas y la migraña se ha disparado durante el confinamiento», asegura el neurólogo.

Y es que, como explica Diez, durante este periodo de confinamiento, muchos son los que «no han dormido bien, han padecido preocupaciones y han sentido angustia». «Los miedos y la tensión psicológica han incrementado de forma notable la frecuencia de crisis de migrañas. Es lo que he visto en estas últimas semanas», afirma.

Pero no solo han sido pacientes nuevos los que han llegado a su consulta preocupados por unos dolores de cabeza desconocidos para ellos, los pacientes migrañosos, que habitualmente conocen bien cómo son sus dolores de cabeza en cuanto a duración, intensidad y frecuencia, también han visto alterados sus parámetros en estos meses: «La prevalencia de la migraña oscila entre el 12 y el 17% de la población mundial. De esa población afectada, entre un 20 o un 30% tienen cuatro crisis al mes. Pero los pacientes con migraña severa, los que van a consulta, que son los que tienen más de cuatro crisis al mes, esos han asociado cefaleas tensionales estos días.

La migraña es un dolor de cabeza episódico, con frecuencia muy variable en cada paciente. En ellos se puede asociar una cefalea continua de menor intensidad fluctuante, que  frecuentemente les  generar preocupacion , al haber cambiado su patron habitual de  dolor; este tipo de Cefaleas se denominan Cefaleas mixtas

Incremento de crisis que derivan en migrañas crónicas y migrañas asociadas a cefaleas tensionales son algunas de las secuelas de dos meses de confinamiento estricto. De miedos e incertidumbres. Entonces, ¿se acabarán estos dolores de cabeza al acabarse el confinamiento? Según el neurólogo Mateo Diez, «habrá que esperar a ver cómo evolucionan».

«Las cefaleas tensionales son la causa número uno de consulta en las salas de neurología. Inconscientemente, cuando estamos nerviosos, angustiados o preocupados ponemos tensa la musculatura pericraneal y cervical. Esa tensión muscular, de alguna manera nos genera dolor de cabeza. Todo lo que nos genera tensión nerviosa se transforma en tensión muscular y normalmente genera dolor de cabeza», explica Diez.

Pero además, esto conlleva miedo. Porque tener dolor de cabeza de manera seguida asusta. «Genera mucho miedo. Cuando tienen dolor de cabeza durante 10, 15 o 20 días al mes generan más tensión nerviosa, más tensión muscular y más dolor de cabeza, es como un circulo vicioso y se cronifica», asegura el doctor.

Y el problema llega cuando, ante estas situaciones de dolor, abrimos el botiquín que tenemos en casa y nos automedicamos. Los analgésicos son, evidentemente, la solución para el dolor, pero solo administrados de manera pautada por un médico. Porque de lo contrario el resultado es que a las consultas llegan pacientes que han logrado el efecto contrario al que buscaban. «Estos pacientes hacen mucho abuso de analgésicos que lo complica todo mucho más. El cerebro se acostumbra a tomar dos o tres analgésicos al día y cuando no se toman hay un dolor de cabeza de rebote y vuelven a tener dolor de cabeza», cuenta el neurólogo.

Uno de los factores precipitantes de las cefaleas tensionales y de la migraña es no hacer ejercicio, por lo que, según Mateo Diez, cuando se «pueda salir y hacer una vida más rutinaria» es probable que este tipo de cefaleas «vayan remitiendo».

Para evitar hacer un mal uso de los analgésicos es importante acudir al médico y que diagnostique de dónde viene el dolor de cabeza, hay que etiquetarlo para poder poner un tratamiento efectivo.

Aunque Mateo Diez no ha hecho trabajo hospitalario en estas semanas sí ha sido consciente de que uno de los síntomas reportados en la infección por coronavirus es el dolor de cabeza. Algo que le ha llevado a leer trabajos e investigaciones al respecto.

«Leí hace poco uno que decía que uno de los síntomas inespecíficos presentes en las primeras etapas de la infección en pacientes hospitalizados eran, en primer lugar, las mialgias y, en segundo, las cefaleas en un 14,1% según un registro de un hospital de Albacete, uno de los más afectados», explica.

Y aunque esta incidencia no es alta sí es importante y reseñable. Ha sido el segundo síntoma más reseñable neurológico que presentaban esos pacientes hospitalizados. Sin embargo, los pacientes con migrañas saben diferenciar muy bien cómo es su dolor de cabeza para no asustarse y pensar en un contagio. «Solo aquí en España hay 4,5 millones de personas que padecen migraña y de ellas un millón lo hacen de manera crónica», afirma Diez.

Estos pacientes ya saben lo que es una migraña y cómo manejarla. «Nuestro consejo a estos pacientes es que cuando tienen los primeros síntomas no se lo planteen dos veces, que se tomen rápidamente el analgésico, porque si no se corta en el inicio de la migraña luego ya es muy difícil hacerlo. Siempre hay que llevar el analgésico en el bolso, a poder ser tipo 'flash', y si no, beber mucho agua para que llegue muy diluido al estómago y se absorba rápidamente y entre en el torrente sanguíneo», finaliza.