Aranda registra 50 positivos por covid en un día y se decreta el cierre de tres bares

En los últimos días se han registrado un total de 64 PCR positivas, más de 50 en la jornada del viernes, con tres posibles brotes. Aunque los datos reales de infectados, según fuentes sanitarias, serían superiores y el número de positivos rondaría ya el centenar, por las pruebas realizadas este sábado y que no se registran en los datos oficiales.

La mayor parte de ellos corresponden a personas asintomáticas o con síntomas leves. De momento, solo hay un paciente ingresado en el hospital de los Santos Reyes, un hombre de 43 años, internado en el centro desde el pasado jueves. Por otra parte, dos mujeres que iban a dar a luz en el centro hospitalario tuvieron que ser remitidas al Hospital Universitario de Burgos esta semana, tras dar positivo en la prueba y ante la necesidad de contar con un quirófano covid.

De momento, en la zona Norte, según los datos oficiales de la Junta, se han confirmado 46 casos de coronavirus por prueba PCR, lo que supone un 23,4 por cada 10.000 tarjetas sanitarias. En la zona Sur suman 16 positivos, un 9,89 por cada 10.000 tarjetas. Más tranquilidad en la zona Aranda Rural, que atiende a 40 municipios de la comarca de la Ribera del Duero burgalesa, donde se han confirmado dos casos, una incidencia de 2,58 y aparece marcado en amarillo.

La situación sanitaria de Aranda ha provocado también el cierre de tres establecimientos hosteleros. Los bares La Resinera, La Buena Vida y La Bombilla tuvieron que clausurar los locales en la tarde del viernes por tener positivos en sus plantillas o contactos de riesgo. «Por responsabilidad y solidaridad tenemos que cerrar nuestro restaurante por un tiempo. Una persona de nuestro equipo tiene síntomas compatibles con #COVID19. Se encuentra bien por ahora», han informado desde La Resinera a través de sus redes sociales. De forma paralela, durante toda la jornada del sábado se siguen realizando pruebas a personas que han estado en contacto laboral, familiar o de ocio con los contagiados.

Desde el Ayuntamiento de Aranda comenzarán a analizar esta semana las aguas residuales, como ya se están haciendo en otras ciudades, para conocer con más exactitud la carga viral que existe en la ciudad. «Ya llevamos tiempo estudiando cómo hacerlo y vamos a empezar ya, para intentar adelantarnos al virus», ha defendido el teniente de alcalde, Francisco Javier Martín Hontoria. Desde el Consistorio hacen un llamamiento «a la responsabilidad y a extremar las precauciones». En esta línea, advierte que serán vigilantes para que se cumplan estrictamente las restricciones marcadas por la Junta de Castilla y León.

A la responsabilidad también ha apelado el gerente del hospital, Evaristo Arzallus, incidiendo en que «siguen preocupando las personas de las residencias de ancianos y hay que protegerles de vectores de transmisión del virus como son los jóvenes que a veces no hacen caso y dentro de poco con los temporeros».

En esta línea, el hospital Santos Reyes ofrecerá la posibilidad de alojar a temporeros que den PCR positivas porque, «en caso contrario sería muy difícil controlar el virus». Arzallus afirma que ya ha trasladado la propuesta al Consejo Regulador de Ribera del Duero y tiene la intención también de transmitirlo al Ayuntamiento de Aranda.

La Consejería de Sanidad, por el momento, no ha solicitado autorización judicial para aplicar medidas de contención en el municipio burgalés, como sí lo hizo hoy mismo en el caso de la zona básica de salud de Íscar. Sin embargo, fuentes del Gobierno regional confirmaron a Ical que no descartan hacerlo en función de la evolución del rebrote detectado en Aranda.