El SARS-CoV-2, el virus que provoca la enfermedad que se conoce como covid-19, continúa propagándose y con ello, surgiendo nuevas variantes. Las autoridades sanitarias vigilan especialmente dos de ellas, derivadas de la ómicron, que escapan a la inmunidad que proporciona el haber ... pasado la infección, e incluso a la de las tres dosis de la vacuna.
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Las nuevas subvariantes, denominadas la BA.4 y la BA.5, presentan otros síntomas que las diferencian de ómicron sigilosa. Según el Instituto Nacional de Enfermedades Transmisibles de Sudáfrica, las diferencian del linaje original BA.1. La diarrea, el dolor de garganta y un tiempo de incubación más breve son las características diferenciales. Pero también comparten otros síntomas con sus predecesoras, como la fiebre, la fatiga, el dolor de cabeza, la congestión y la tos.
Señalan también que BA.4 y BA.5 vuelven a provocar pérdida de olfato y gusto, síntomas que no eran tan frecuentes en las últimas variantes de la covid.
Los síntomas más comunes observados hasta el momento han sido fiebre, cansancio, tos y mucosidad, dolor de garganta, cabeza y muscular. Además, algunos pacientes han informado de fatiga de malestar general y falta de apetito. También puede ocasionar, aunque se ha notificado con menos frecuencia, lumbalgia, náuseas y sudores nocturnos.
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Ambas son subvariantes de la predominante ómicron, cuyo sublinaje BA.2, se ha extendido conocido como 'ómicron sigilosa'. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ya advertía de que puede ser hasta un 10% más contagiosa que las conocidas hasta el momento, aunque hasta el momento, los síntomas que manifiesta son menos graves que las anteriores.
Una de las dudas que asaltan a la población es si estas variantes pueden escapar a la protección que ofrecen las vacunas de Pfizer, Moderna, Astrazeneca y Janssen, aunque la EMA destaca la importancia de vacunarse para evitar la enfermedad grave a causa de la covid en cualquiera de sus variantes.
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Otro estudio del Biomedical Pioneering Innovation Center de la Universidad de Pekín asegura que las personas que se infectaron con ómicron pueden reinfectarse pese a haber recibido todas las dosis de la vacuna.
El pasado mes de junio ya se conocía que estas variantes escapan a la inmunidad que proporciona el haber pasado la infección, e incluso a la de las dosis de refuerzo. Un estudio publicado en bioRxiv, una institución educativa y de investigación sin fines de lucro, y realizado por universidades de Pekín, Nankai y Capital Medical junto al laboratorio Changpingha, concluía que las denominadas BA.2.12.1 y BA.4/BA.5 evidencian una mayor facilidad de infección.
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