El arca de Noé de Burgos acoge a cuatro huéspedes en aislamiento por covid

«El arca de Noé está pensada para que pueda hacer la cuarentena tras un positivo gente que por lo que sea no pueda hacerla cómodamente en su casa», así lo explicaba el gerente del hotel, Luis Mata, pocos días antes de que comenzaran a recibir a estos huéspedes el pasado 8 de octubre.

Después tres semanas, Mata garantiza que «todo está funcionando muy bien». En este sentido, las personas que han pasado por allí con PCR positiva pero prácticamente asintomáticas, no han podido abandonar sus habitaciones pero se han sentido «perfectamente atendidos y vigilados».

Lo corrobora el propio Mata, «les llamamos a las habitaciones para ver cómo se encuentran, y también les llevamos el periódico o un refresco y se lo dejamos en la puerta si lo solicitan», explica. Las normas durante la estancia en el hotel pasan por que «el cliente-paciente no puede salir de la habitación en ningún momento, está a régimen de pensión completa, pero nosotros no podemos hacerle la limpieza porque no podemos entrar tampoco a su habitación».

El perfil de las personas que han pasado por esta arca de Noé es muy parecido. Según Mata todos tienen en común «que se encuentran bien» y «el miedo a permanecer en sus casas porque conviven con algún familiar de alto riesgo, generalmente con personas mayores a las que no quieren exponer al virus«.

Para Mata está siendo una buena experiencia y, además, confirma que han tenido la suerte de que todos los usuarios que han pasado el aislamiento en el hotel, están bien: «Ninguna ha desarrollado más síntomas ni ha empeorado y esperamos que siga siendo así», concluye.