En el aire el futuro de los 90 trabajadores del San Juan de Dios, que se sienten «utilizados»

«Por parte de la empresa seguimos sin ninguna noticia. Hemos venido a trabajar como un día normal y aquí nadie nos ha dicho nada», lamentaba Pilar López-Gómez, presidenta del comité de empresa. Sin una convocatoria de reunión, ni siquiera una nota informativa en alguno de los tablones del centro, los trabajadores se mostraban incrédulos por el trato recibido.

«El único que ha tenido la delicadeza de llamarnos esta mañana ha sido el gerente regional del Sacyl, Manuel Mitadiel, que nos ha informado de que no se llegaba al acuerdo y no se iba a firmar el concierto», explicaba López-Gómez, al tiempo que aseguraba que se han enterado «por la prensa» de la rescisión del convenio.

«Me chocaba lo que se había filtrado a la prensa, porque cuando yo estuve reunida con él le pedí la reubicación del personal y me dijo que no se podía y esta mañana leí que se reubicaría. Pero no, no se puede, nos tenemos que ir a la bolsa de empleo todos», afirmaba.

La plantilla muestra su malestar por no haber recibido ningún tipo de información por parte de la empresa por ninguna de las vías posibles. «No sabemos si se va a utilizar el hospital para otra cosa, si nos van a echar, no sabemos nada. Es alucinante», exclamaba enfadada.

Los ánimos entre la plantilla están «mal» por la situación que se les viene encima. «Hacemos alguna broma, pero estamos mal. Siempre hemos bromeado con que nos enteraríamos por la prensa de que se cierra el hospital, pero ahora tenemos la incertidumbre de no saber qué va a pasar con nosotros».

Más de 90 trabajadores están afectados por esta decisión, que no saben si tienen que ir buscando un empleo nuevo o si el San Juan de Dios se reinventará para seguir en funcionamiento. Lo que sí tienen claro es que ya no les quedan ganas de salir a la calle a reivindicar como hicieron anteriormente. «No vamos a hacer nada, creemos que nos están utilizando a los trabajadores y estamos un poco cansados. Si cierran que cierren y si no pues nos quedamos», sentenciaba Pilar.