La investigación sobre el presunto homicida de Marta Calvo abarca ya a seis mujeres

Las dos últimas mujeres han prestado ya declaración ante la Guardia Civil para esclarecer otros delitos que los investigadores de la muerte de Marta Calvo atribuyen a Jorge Ignacio P., el delincuente encarcelado tras confesar que había descuartizado el cadáver de la joven, aunque niega haberla asesinado.

Tras ser localizada por la Guardia Civil, una de las prostitutas manifestó que Jorge Ignacio P. intentó mantener relaciones sexuales con la introducción de cocaína en los genitales de la mujer, sin su consentimiento, pero ella se negó y el cliente entonces se marchó. La segunda víctima declaró que el narcotraficante la drogó tras echarle una sustancia en una bebida que ella tomó antes de la relación sexual, según la versión de esta mujer, y le metió cocaína en la vagina. También afirmó que ella accedió a participar en la 'fiesta blanca' con droga que le ofreció Jorge Ignacio P., pero rechazó que ese sexo pagado fuera con cocaína en sus genitales.

Los testimonios de estas dos mujeres figuran en las diligencias de investigación que realizó la Guardia Civil para esclarecer cómo pudo morir Marta Calvo. El atestado ya ha sido entregado en el Juzgado de Instrucción número 6 de Alzira, encargado de investigar la desaparición y muerte de la joven.

Después de que trascendiera la existencia de más víctimas de la peligrosa práctica sexual que el narcotraficante exigía en las casas de citas, el subdelegado del Gobierno en la provincia de Valencia, Roberto González Cachorro, hizo ayer un llamamiento «a todas aquellas personas que puedan tener alguna relación y aportar algo de luz» para que colaboren con la investigación.

Tras ser preguntado si la policía cree que Jorge Ignacio es un asesino múltiple, Cachorro respondió que para considerar esa posibilidad «tienen que confirmarse muchísimas más cuestiones», y agregó que se están revisando todos los casos susceptibles de tener relación con el método o práctica sexual que utilizaba el delincuente colombiano.

Los investigadores están realizando indagaciones en las casas de citas que frecuentaba Jorge Ignacio, así como en las ciudades y poblaciones que ha residido o visitado en los últimos años, por si reabren más casos de muertes de mujeres por intoxicación de droga. «Esto no quiere decir que la situación se haya repetido, pero queremos descartar todo», afirmó el subdelegado del Gobierno. También señaló que es muy importante determinar si las prácticas donde se mezclaba el sexo y la cocaína eran voluntarias o podrían haberse realizado sin el consentimiento de las víctimas. «Este trabajo es minucioso, lento y necesitamos tiempo», añadió Cachorro.

Conforme avanzan otras investigaciones reabiertas por la Policía Nacional, el hombre encarcelado por la desaparición y muerte de Marta Calvo podría ser acusado de dos homicidios más. Como ya informó LAS PROVINCIAS, el Juzgado de Instrucción número 14 de Valencia ha reabierto el caso de la prostituta brasileña que falleció en abril de este año tras mantener relaciones sexuales con Jorge Ignacio P. en otra 'fiesta blanca' en una casa de citas situada junto a la plaza de Cánovas del Castillo en Valencia. Una huella del narcotraficante hallada en la habitación de la víctima y las imágenes grabadas por una cámara en la entrada del prostíbulo incriminan al delincuente encarcelado.

Los agentes del Grupo de Homicidios de la Policía Nacional han revisado también el caso de otra prostituta que murió en junio en una vivienda de Valencia tras un encuentro sexual con un hombre que los investigadores creen que puede ser Jorge Ignacio. El cadáver fue descubierto por una compañera de piso horas después del encuentro sexual que la víctima mantuvo con el individuo.

Cuando el médico del SAMU llegó a la casa situada en la zona de la avenida de la Plata, la mujer llevaba varias horas muerta en su habitación. El hombre que había estado con ella se marchó y sustrajo el móvil de la prostituta, al parecer, para que no pudieran identificarlo. Las primeras investigaciones se centraron en una posible intoxicación de cocaína después de que la policía y el forense constataran que el cuerpo no presentaba signos aparentes de violencia.

Los investigadores sospechan que Jorge Ignacio fue el último cliente de la prostituta fallecida tras analizar otro teléfono de la víctima y la geolocalización del móvil que utilizó el narcotraficante cuando contactó con la mujer desde l'Olleria, localidad donde residía en junio.

Otra muerte en el punto de mira es la de la joven brasileña Cristiana F. S., quien también habría fallecido de una sobredosis de droga, al parecer, en 2015 en una vivienda de Valencia. La víctima tenía 25 años cuando murió en circunstancias similares a las de Marta Calvo y las otras dos mujeres.

Manuel (Noviembre de 2019) | Marta Calvo Burón, la joven que soñaba con ser modelo

Marta Calvo, una joven que soñaba con ser modelo, desapareció el pasado 7 de noviembre. Según la investigación de la Guardia Civil, la joven murió el mismo día que envió un mensaje de wasap a su madre con la ubicación de la cita sexual que tenía con Jorge Ignacio P. en una vivienda de Manuel. Dos días después, la madre acude a la casa por la falta de noticias de su hija. Tras hablar con el sospechoso, decide acudir a la policía. El 15 de noviembre, la Guardia Civil realiza los primeros rastreos y registra la vivienda del presunto homicida después de que este huyera. Una semana después, el 23 de noviembre, se hace pública la desaparición de la joven. Las labores de búsqueda se intensifican y la Guardia Civil inspecciona las casas de Manuel y l'Olleria donde residía el principal sospechoso de la muerte de Marta: Jorge Ignacio P., un narcotraficante colombiano que en abril fue investigado por la muerte de una prostituta en Valencia. El 4 de diciembre, el delincuente se entrega a la Guardia Civil y confiesa que descuartizó el cadáver y lo tiró a varios contenedores.

Valencia (Abril de 2019)| Arliene, víctima que murió intoxicada por cocaína

Arliene, una prostituta brasileña de 32 años, falleció en abril tras mantener relaciones sexuales y consumir cocaína con Jorge Ignacio P. en un piso la plaza Cánovas de Valencia. El narco huyó cuando la mujer empezó a sufrir convulsiones. Sus compañeras de la casa de citas acudieron a la habitación pensando que podía estar sufriendo algún tipo de maltrato, pero la encontraron inconsciente y llamaron al 112. La joven falleció días después en el Hospital Clínico. La Policía Nacional identificó plenamente al narcotraficante colombiano y lo investigó por esta muerte, pero no pudo atribuirle ningún delito.

Valencia (2019) | Mujer que se negó a complacer al narcotraficante

Su nombre no ha trascendido, pero también es prostituta y denunció que el acusado intentó mantener relaciones sexuales con ella con la introducción de cocaína en sus genitales. Ella no quiso y él se fue.

Manuel (2019) | La denunciante que participó en una 'fiesta blanca'

La joven prostituta declaró ante la Guardia Civil que Jorge Ignacio P. la drogó con una sustancia mezclada en una bebida en la vivienda de Manuel durante otra 'fiesta blanca' y que le metió cocaína en sus genitales.

Valencia (2015) | Cristiana F., joven que falleció por una sobredosis

Otro caso es el de la prostituta brasileña Cristiana F. S., que habría muerto de una sobredosis de droga, al parecer, en 2015 en Valencia. Tenía 25 años y falleció cuando estaba con dos hombres en un piso.

Valencia (Junio de 2019) | La chica hallada muerta por sus compañeras de piso

Esta joven colombiana murió en Valencia en junio de este año en otra 'fiesta blanca' cuando estaba un cliente en la vivienda donde ejercía la prostitución en la zona de la avenida de la Plata. La policía sospecha que este hombre pudo ser Jorge Ignacio P. tras analizar el móvil y una conversación de wasap que la víctima mantuvo con el narcotraficante colombiano cuando este contactó con ella desde l'Olleria. El cadáver no presentaba signos de violencia cuando fue hallado varias horas después por sus compañeras de piso. Los investigadores barajaron la posibilidad de que hubiera fallecido por una intoxicación de cocaína.