García Cadiñanos reconoce vivir «un auténtico Domingo de Ramos, lleno de alabanzas, aclamaciones y vítores»

En un acto con familiares, amigos, el arzobispo emérito Fidel Herráez entre los asistentes, el sacerdote burgalés García Cadiñanos, acompañado del actual obispo de Burgos, Mario Iceta, ha mostrado un largo agradecimiento a todos los que le han acompañado en su etapa en Burgos y también ha rogado el perdón a los que ha fallado. Visiblemente emocionado, García Cadiñanos ha anunciado que recibirá la ordenación episcopal el próximo 4 de septiembre en la catedral de Mondoñedo y tomará posesión de la diócesis en la misma celebración.

Aunque García Cadiñanos ha remarcado que «la nueva misión que la Iglesia me encomienda es una tarea de servicio, no de poder». Él no toma posesión de la diócesis, al contrario, está le tomará a él.

Emocionado por dejar una tierra en la que ha crecido y se ha formado, su tierra, ha señalado que este «no es el fin de una carrera, sino un paso más en el camino de expropiación personal y de vocación».

Más de 200 mensajes y más de 40 llamadas han llegado hasta el móvil del sacerdote. Abrumado ha reconocido estar viviendo «muy acompañado», desde este miércoles cuando se conocía la noticia aunque no fuera oficial. García Cadiñanos ha explicado sentirse en un «Domingo de Ramos, lleno de alabanzas, aclamaciones y vítores». Pero ha querido adelantarse al futuro y ha vaticinado que «seguro que llegan momento de Viernes Santo». Para cuando lleguen ha pedido la misma compañía y la esperanza de que «al final siempre vence la Pascua».

García Cadiñanos nació en Burgos el 7 de mayo de 1968. Aquí, en la Facultar de Teología del Norte de España en su sede de Burgos, obtuvo el Bachiller en Teología y, posteriormente, la licenciatura en Teología Dogmática. Su actividad pastoral comenzó en la parroquia de Santa Catalina de Aranda de Duero. En sus últimos años en Burgos fue párroco de la parroquia de Nuestra Señora de las Nieves en Burgos. Además, ha sido el delegado diocesano de Cáritas y desde el 2016 es también vicario general de la diócesis de Burgos y moderador de Curia.

La diócesis de Mondoñedo-Ferrol la conforman parte de dos provinciaS, la zona norte de Lugo y de La Coruña. García Cadiñanos ha reconocido que su idiosincrasia es diferente, de esta forma, a lo que está acostumbrado, «las relaciones institucionales serán diferentes». Pero les ha transmitido que «les llevo ya en el corazón y me ofrezco para ser un pastor a imagen del único pastor».

Por su ubicación, se trata de una Iglesia periférica «por aquí difícilmente se pasa, aquí se va». Es una Iglesia que García Cadiñanos apenas conoce pero que descubre «muy ilusionado en la clave de la conversión pastoral a la que nos convoca el papa Francisco y con mucho deseo de vivir esta nueva etapa misionera siendo discípulos y servidores».