Down Burgos amplía servicios con un espacio multisensorial para Atención Temprana

El aula multisensorial era una de las necesidades que estaba, hace tiempo, en el 'debe' de la asocaición, reconoce su gerente, Luis Mayoral. Sin embargo, les ha faltado espacio y financiación para acometer el proyecto. Y, ahora, ya han contado con ambos. La financiación ha corrido a cargo de la Fundación 'la Caixa' y Caixabank, como parte de su política de integración en el territorio, que han aportado 11.000 de los 12.000 euros que ha costado.

Mientras, el espacio multisensorial se ha ubicado un aula del edificio, de 20 metros cuadrados. Allí han instalado todos los recursos, empezando por una piscina de bolas y siguiendo por una cama vibradora, compuesta por un colchón de agua que se mueve al ritmo de la música. También hay columnas sensoriales, una luz negra, filamentos luminosos y un panel de luz con el que interactúan los niños.

La música, las luces, los colores, el movimiento estimulan a los más pequeños, atraen su atención, las ayudan a fijarla y, a partir de ahí, se empieza con las terapias, con la formación, explica Mayoral. Por ejemplo, uno de los paneles reproduce sonidos e imágenes, lo que ayuda al asociar un sonido a una imagen y a aprender a identificarlos. «Los chavales se enganchan porque hay muchos estímulos y, eso, ayuda».

El aula multisensorial se montó a finales de 2019, aunque no se puso en funcionamiento hasta principios de 2020. Luego, llegó la pandemia y no se ha podido usar tanto como se hubiera querido. Aun así, es un recurso muy necesario para Down Burgos, que a través de su servicio de Atención Temprana atiende a 16 niños con dificultades de desarrollo en Burgos capital. También a los 52 de la provincia, con un equipo itinerante, financiado por la Junta.