Treviño se acogerá a las restricciones del País Vasco

A través de un bando firmado por el propio Enrique Barbadillo, el Ayuntamiento anuncia que no se aplicarán las restricciones impuestas por el Gobierno de Castilla y León, sino las que plantea el País Vasco. La razón no es otra que el Real Decreto de 3 de noviembre por el que se prorroga el Estado de Alarma. En su disposición segunda, que aborda la sitaución de los enclaves, se recoge que los mismos recibirán el tratamiendo de la provincia que les circunda aunque sea de otra comunidad autónoma.

Así, la Junta de Castilla y León gestiona la evolución epidemiológica de Condado de Treviño, pues es la que contabiliza los contagios, y por tanto la que se encarga de marcar los niveles de riesgo. El pasado sábado, ante una incidencia descontrolada, con más de 1.500 casos por 100.000 habitantes en siete días, el Gobierno autonómico decidía imponer medidas extraordinarias en el municipio. Sin embargo, el Ayuntamiento considera que debe someterse a la norma vasca.

Barbadillo afirmaba el sábado que es lo más lógico, pues Treviño está enclavado en Álava y los vecinos hacen vida en Vitoria. De este modo, las restricciones que se aplicarán ante la elevada incidencia del virus son el cierre perimetral del municipio (algo que no contempla Castilla y León), el toque de queda a las 22:00 (y no a las 20:00), la limitación a cuatro personas en las reuniones (preferiblemente convivientes, una medida que también impone la Junta) y cierre total de hostelería y suspensión de la actividad deportiva en grupo.

Eso sí, no se aplicarán otras medias del Gobierno regional como el cierre a las 18:00 del comercio (que podrá estar abierto hasta las 21:00, como en Álava) o la suspensión de todas las actividades o lúdicas, aunque en ambos casos hay restricciones de aforo. Barbadillo aprovecha para volver a denunciar la situación en la que se encuentra el enclave, «en tierra de nadie», de modo que cuando se plantean este tipo de restricciones existen numerosas contradicciones entre la aplicación de la norma y al realidad geográfica, social y económica del municipio.

Lo que no pone en duda para nada el alcalde es la declaración de Treviño como zona de «alto riegos» pues se han detectado numerosos contagios. Lo más llamativo ha sido el brote declarado en la residencia de Cucho, con más de una treintena de afectados entre trabajadores y usuarios. El centro había permanecido libre de covid justo hasta que le administraron la vacuna, así que ha sido un duro golpe. La incidencia acumulada supera los 1.700 casos por 100.000 habitantes a siete días (que son más de 3.000 a catorce).