Abril: la Semana Santa resucitó en Burgos tras la pandemia

Pero abril también dejó otras imágenes para el recuerdo en la provincia porque Burgos retomó los actos de la tradicional Semana Santa tras dos años de restricciones por la pandemia. Esta celebración, un gran reclamo turístico para la capital, llegó inmersa en plena polémica con los trabajadores de la Catedral de Burgos, que se ponían en huelga ante la intención del Cabildo de aplicar un nuevo ERTE hasta enero de 2023.

A principios de abril los sindicatos denunciaban que la situación de los trabajadores de Turismo en la Seo era ya insostenible debido a la gestión «penosa» del Cabildo, que «ha derivado en un clima laboral irrespirable«. Así lo explicaba Luis Gutiérrez, el secretario de Organización de la Federación de Servicios, Movilidad y Comercio de UGT. Aseguraba que la situación »tan extrema« les había llevado a presentar un segundo expediente ante la Inspección de Trabajo, que emitió una resolución en noviembre y que el Cabildo, según Gutiérrez, había ignorado.

Así, el Domingo de Ramos hacían visible su protesta en plena procesión de la borriquilla, en su segundo día de huelga indefinida para reivindicar la retirada del ERTE preventivo y el relevo al frene de las relaciones laborales de la gerente. La huelga no fue desconvocada hasta el 12 de abril cuando, con la mediación del arzobispo, el Cabildo renunicaba a seguir adelante con el ERTE y cesaba a la gerente.

Mientras tanto, las tradiciones más significativas de la Semana Santa se retomaban en todas las localidades burgalesas, procesiones, el acto del Descendimiento de Cristo y la procesión del Santo Entierro que fue multitudinaria en Burgos. También la Bajada del Ángel en Aranda de Duero o la Fiesta del Judas en Villadiego.

En un 2022 especialmente negro en siniestralidad vial, abril dejó un muerto en la A-1. Un camionero de 43 años y vecino de Roa de Duero fallecía el 28 de abril a la altura de Quintanilla de la Mata cuando el vehículo que conducía colisionaba contra una furgoneta y como consecuencia caía por un terraplén. Los servicios sanitarios no pudieron hacer nada por salvar su vida.

Siguiendo con las carreteras, dos siniestros registrados el 18 de abril en Monasterio de Rodilla y Briviesca dificultaban aún más el retorno del puente de Semana Santa para vascos y navarros. Los accidentes provocaron retenciones kilométricas en la AP-1 . En total, fueron cerca de 60 kilómetros de circulación complicada.

Otro atasco monumental de 18 kilómetros provocado por la colisión entre tres turismos y una furgoneta en la AP-1 a la altura de Cameno, en sentido Burgos en plena operación especial de tráfico. Aunque no hubo que lamentar heridos de consideración, el accidente provocó uno de los mayores atascos del año en la provincia.

Los delitos al volante también fueron relevantes este mes. Un conductor fue interceptado conduciendo a 140 kilómetros por hora en una travesía en Montes de Oca.

Los atropellos en la capital han tenido especial protagonismo a lo largo del año y en abril se produjeron dos en menos de 12 horas. En el primero una mujer de 42 años resultaba herida en la calle Conde de Guadalhorce de la capital, en la rontonda del Puente de Castilla. De madrugada el mismo día en el Paseo de las Fuentecillas un turismo arrollaba a un joven de 19 años. Ambos resultaron heridos de diversa consideración pero fueron dados de alta días más tarde en el hospital universitario.

Uno de los sucesos más llamativos del mes de abril fue la detención de un hombre por malos tratos al que hallaron un gran arsenal de armas en su domicilio. Policías de los TEDAX de la Policía Nacional participaron en la incautación de las armas entre las que había granadas y botes de humo. Todo ello en su vivienda de Burgos.

En el interior de un armero se halló una gran cantidad de armas, entre las que se encontraban varios rifles, escopetas, carabinas, bayonetas y abundante munición. Alguna contaba con su licencia y guía correspondiente, si bien otras carecían de este requisito.