Sonorama alcanza las 145.000 personas en su edición más emotiva

Sonorama ha sumado 145.000 asistentes en cinco intensos días de conciertos en Aranda de Duero. Una edición que, según el director del festival, Javier Ajenjo será recordada como «el festival de las emociones, el más emocionante en 27 años, que es algo difícil que pase». El viernes y el sábado se alcanzó el punto álgido de asistencia con 40.000 personas por día en el recinto. A eso se unieron las dos jornadas de arranque que acogieron a más de 30.000 festivaleros el miércoles y el jueves. «Tomamos una decisión difícil que nos dejaba en una situación de fragilidad al reducir el aforo en un 10%, pero hemos logrado mejorar los espacios y que la gente esté más cómoda. Eso significa no tener un festival más grande, sino tener un festival mejor. Creo que lo hemos conseguido.», ha valorado Ajenjo.

En esta línea, el director de Sonorama ha incidido en su defensa al cartel elegido para este año que ha dado cabida a variedad de estilos, de diversos géneros y dirigidos a todas las generaciones, además poniendo el acento en la necesidad de dar oportunidades a los grupos más desconocidos o que acaban de empezar. «Lo más fácil es traer a los cabezas de cartel, eso lo hace todo el mundo. Lo más difícil es crearlos. Creo que hemos hecho todo lo posible por volver a tener un centenar de bandas emergentes que han tenido su oportunidad y que nos han transmitido su agradecimiento y, sobre todo, su emoción por estar presentes en un festival tan pequeño y tan grande a la vez como el que tenemos», ha destacado.

El domingo fue un día de despedida con conciertos diurnos en la ciudad, y con la sorpresa de la actuación de Sidecars en la plaza del Trigo. Un día en el que los lugareños y los más rezagados disfrutaron de las actuaciones con menos masificaciones y mayor tranquilidad. El telón de Sonorama se cerraba ya entrada la tarde en el escenario Charco, situado en el parque de la Isla, a ritmo de Izaro.

El festival ha recorrido cinco días con muchos sentimientos encontrados gracias a las despedidas, a los conciertos homenaje, a los retos pendientes conseguidos y algunas sorpresas bien guardadas. «En Sonorama Ribera han tenido lugar despedidas. Sin amargura, sin tristeza, sin dolor. Con infinito amor, con admiración, con nostalgia, con la seguridad de que nos volveremos a encontrar en el camino de la vida», recalcan desde Sonorama a la hora de definir la edición que se acaba de despedir.

En esta edición se ha vivido el adiós de grupos que han formado parte de su historia como el Columpio Asesino, Niños Mutantes o Rayden que se encuentran en su última gira antes de abandonar los escenarios. Incluso, estos días, en el escenario arandino también han anunciado su despedida Adrián y Juan Carlos de Funzo & Baby Loud. Al grito de «Sonorama Ribera», arropados por el mar de lágrimas de una joven y entregada multitud. En los momentos que quedarán en la retina y en la memoria para la emoción

se encuentra también, según su director, el homenaje a Supesubmaria y esa presencia sobre el escenario de la plaza del Trigo de 'Chino' y Jaime, con la entrega de un banco-libro que quedará fijo en ese lugar como homenaje al grupo de Baeza. «Ese banco eterno que va a quedar en nuestra plaza y que se va a convertir en un lugar de peregrinación, seguro», confía Ajenjo.

Otro de los mensajes que ha lanzado el festival en esta edición, es la importancia de lograr que las nuevas generaciones se sumen como público gracias a su fuerte apuesta por la música urbana, muy presente en el cartel y con nombres estelares en los escenarios principales. «Hay que asumir riesgos, hay que seguir apostando por la música, por el futuro», ha insistido el director de Sonorama.

En este sentido, ha aludido a nombres como Natos y Waor se comieron el escenario principal, se ganaron al público y salieron por la puerta grande, o YSY A, artífice del «Quinto Escalón», el foro de Buenos Aires donde nació el actual movimiento urbano que tanto peso tiene a nivel internacional. Dos de los ejemplos destacados de este estilo musical en Sonorama que también sumó a SFDK, Funko y Baby Loud, dentro de las propuestas de nueva tendencia que se han disfrutado en esta vigésimo séptima edición.

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