La Ruta Ribera confía en el tirón de la vendimia para completar un octubre de récord

Por ello los adheridos al producto enoturístico han puesto en marcha experiencias originales como una visita astronómica, almuerzos en viñedo, o un trivial enológico.

La subida del número de visitantes en la Ruta del Vino Ribera del Duero atiende a la especial atracción que supone para los visitantes poder vivir en primera persona el momento del año en el que más actividad se desarrolla en las bodegas elaboradoras. Son cada vez más los establecimientos que preparan ofertas especiales para llamar la atención de nuevos turistas y compartir con ellos los entresijos de esta época tan especial en la zona.

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Por su parte, la Ruta del Vino Ribera del Duero, se muestra satisfecha con el trabajo que se está realizando en torno a la captación de visitantes en vendimia y recuerda que este tipo de planes enoturísticos siguen manteniendo unos estándares de calidad que buscan la mayor satisfacción del turista. El presidente de la Ruta, Miguel Ángel Gayubo, afirma que «tanto los asociados como el consorcio, seguimos trabajando en esta misma dirección para crear una oferta sólida, dirigida a todos los públicos, dentro y fuera de vendimias».

Acercarse a cualquier bodega desde finales de septiembre se convierte en una experiencia muy diferente. Todas las elaboradoras que realizan visitas durante este periodo de tiempo hacen hincapié en los trabajos que se están poniendo en marcha para recoger y recepcionar la uva. Los enoturistas que se acercan a la Ribera del Duero podrán conocer de primera mano cómo se lleva a cabo la vendimia en el campo, cómo se seleccionan los racimos o cómo los tractores los trasladan para depositarlos en las tolvas.

Muchos establecimientos han preparado, además, visitas específicas que celebran esta época con un acento especial. Talleres de vendimia, pisado de la uva, visitas astronómicas, un trivial enológico, mayor presencia del enólogo e, incluso, la posibilidad de sembrar una planta autóctona en el viñedo, estos son los planes que las bodegas han preparado para que los enoturistas descubran desde dentro la verdadera fiesta de la vendimia.