1.500 amantes del vino se unen en la Feria del Vino de Sotillo de la Ribera

«Lo bueno sabe a Ribera» es un dicho que los de Sotillo conocen a la perfección. Este municipio situado a 18 kilómetros de Aranda de Duero celebró la quinta edición de la Feria 'Sotillo, el vino y yo' el domingo 2 de junio, un evento idóneo para saborear la Ribera del Duero de la mano de su producto estrella y de la gastronomía de la zona.

Con el constante tintineo de las copas como sonido de fondo, entre brindis y bajo el sol acechando en lo alto; así es como han vivido los 1.500 curiosos y amantes del vino el sonado evento que se tuvo lugar en Sotillo de la Ribera este fin de semana.

A dicha iniciativa le dio el pistoletazo de salida la III 'Carrera entre bodegas' que se celebró el día anterior en el mismo lugar. Sus 164 participantes corrieron por el interior de la bodega Valsotillo, situada a más de 30 metros de profundidad.

Un fin de semana completo dedicado al vino, que ha sido posible gracias a la organización de la Comisión Cuesta de San Jorge de Sotillo, de la que es presidente Javier Esgueva, quien tiene muy claros los propósitos del evento: «El objetivo final es poner en valor los pequeños pueblos. El segundo objetivo es, evidentemente, la promoción del patrimonio de las bodegas subterráneas de Sotillo y tercero y no por ello menos importante, la promoción de la cultura del vino y de las bodegas que tenemos en la zona.»

Y para ello, se ha puesto en pie una actractiva dinámica. Todos los participantes de la Feria del Vino han adquirido una copa grabada por 14 euros, que les ha dado derecho a degustar cuatro vinos y cuatro tapas de entre las más de diez de casetas que había disponibles el domingo. Todo ello bajo el apoyo económico de la Diputación de Burgos y del Ayuntamiento de Sotillo, aparte de la financiación de los tickets vendidos.

El evento contó con la participación de cinco bodegas naturales de Sotillo de la Ribera, cuatro de la Aguilera y una de Gumiel de Mercado, entre otras invitadas. Además, cuatro establecimientos de la zona ofrecieron diferentes pinchos para acompañar a la cata: de morcilla de la Ribera, de queso y pimientos, de escabechados y una mini hamburguesa.

Así lo ha definido Javier Esgueva, que con la organización de este evento pretende «que la gente tome conciencia del patrimonio que tenemos» además de «inyectar a los sotillanos y a la gente de la zona la idea de que 'si se puede».

Y es por eso que la Feria del Vino lleva creciendo cada año un 20% más, según apunta Javier, por lo que, contar con una asistencia de 1.500 personas en esta quinta edición del evento no les ha pillado por sorpresa.

Sin embargo, a pesar de la calurosa acogida que ha tenido este año, Esgueva, en nombre de la Comisión de la Cuesta de San Jorge, no cree que la feria cambie o aumente de cara a otros años: «Creemos que la fórmula funciona. Hay muchas peticiones de meter un día más de la feria del vino el sábado pero estamos un poco en contra de esa filosofía y mientras esta comisión sea de los mismos miembros no se va a cambiar».

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