La situación en la zona básica de salud de Quintanar de la Sierra sigue en precario. De los siete médicos asignados, que prestan servicio a unas 4.000 cartillas en seis municipios, solo se cuenta con dos. Tres se han marchado por un concurso de ... traslados y dos están de baja. Además, de los dos que quedan solo uno presta guardias, un servicio claramente insuficiente y que trae de cabeza a ayuntamientos y vecinos.
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Por ese motivo, el Ayuntamiento de Quintanar de la Sierra convocará un pleno extraordinario para trasmitir las explicaciones dadas por el gerente de Atención Primaria en la reunión mantenida el pasado martes. Tendrá lugar la próxima semana, ha explicado la alcaldesa, Montserrat Ibáñez, a petición de PSOE y Cs que, como la propia regidora, están muy preocupados por la deficiencia sanitaria.
Ibáñez critica la falta de previsión de la Gerencia Regional del Salud que, sabiendo que existía el concurso de traslados, no tuvo en cuenta la reducción de profesionales en la zona básica de salud. Ahora, a la marcha de los tres facultativos se suman las dos bajas, y la situación es insostenible. Y los vecinos se quejan al Ayuntamiento, cuando no tiene competencias ni responsabilidad alguna, recuerda.
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Por ese motivo, Ibáñez ha pedido a Sanidad una solución al problema y que los compromisos los ponga por escrito. Y es que garantizan las guardias esta semana y las consultas solo en el centro de salud de Quintanar, pero no se lo dan por escrito para que se lo pueda enseñar a los vecinos. De ahí la convocatoria de pleno extraordinario, para explicar la postura de la Consejería y la situación actual.
La alcaldesa de Quintanar no descarta nuevas movilizaciones, como las que se realizaron a finales del pasado año cuando se temió que el centro de salud se quedase sin guardias en fechas claves de Navidad. Y desde el Ayuntamiento se sumarían, una vez más, a las protestas. «Como si tenemos que ir a Valladolid», insiste Ibáñez, asegurando que el resto de municipios afectados también tienen intención de realizar un pleno extraordinario y movilizarse.
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Aun así, Montserrat Ibáñez confía en que la situación acabe por solucionarse en un plazo corto de tiempo, pues espera que puedan llegar médicos salidos del concurso-oposición de 2018, con 360 plazas. Y exige que se tenga en cuenta la zona para futuros proyectos de reorganización de la atención sanitaria, que garantice la prestación de un servicio de calidad y suficiente.
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