Portavoz de las clarisas de Belorado: «Las monjas han descubierto la fe verdadera, no hay tema inmobiliario»

José Ceacero, al que en ausencia de explicaciones de las monjas clarisas de Belorado se le considera portavoz de las religiosas, asegura que las mujeres se han acogido a la Pia Unión Sancti Pauli Apostoli es porque han descubierto «que la doctrina y la fe que enseña el Concilio Vaticano II no es la doctrina de la Iglesia Católica».

El religioso que ha oficiado misa que las monjas detalla que «están radiantes, con cara de felicidad» y que una de las más mayores que vivió la etapa preconciliar, le ha asegurado a Ceacero que estaba feliz porque vivía la misa de siempre «y se ha puesto a llorar de alegría».

Apunta Ceacero a la intención de arzobispo de Burgos, Mario Iceta, de querer «crear polémica», asegurando que el paso que han dado es por una cuestión «inmobiliaria». Dado que «el señor Iceta y otros les estaban complicando bastante la vida», las monjas de Belorado «han tomado la decisión de querer tener los sacramentos de siempre, la misa de siempre y la doctrina de siempre», que Ceacero asegura que es la anterior al Concilio Vaticano II.

El religioso Ceacero ha sido enviado por Pablo de Rojas, el autoproclamado obispo de la Pía Unión Sancti Pauli Apostoli y relacionado con la trama inmobiliaria expuesta por el Arzobispado de Burgos y que planea sobre el terremoto religioso originado en el convento de Belorado. Sin embargo, el portavoz de las monjas niega la mayor y lo achaca a «excusas» de Mario Iceta.

Ceacero asevera que es una cuestión «que le interesa sacar» a monseñor Iceta. Con respecto al monasterio de Orduña, asegura que «le han impedido a la orden comprarlo. Ahora están diciendo que ellas no pagaron. Cuando querían pagar y no se lo permitían le han impedido comprarlo poniendo no sé qué excusas».

Ceacero dice que «el señor Iceta ha mentido bárbaramente al decir, por ejemplo, que las monjas le han puesto una denuncia con el tema del monasterio de Orduña. Que lo demuestre y van a quedar como lo que son unos falsos en relación a la verdad», declara.

En este sentido, manifiesta que los que «creían que eran sus superiores, les han estado pisando impidiendo hacer lo que ellas querían». Ceacero asegura que fueron las religiosas «quienes se pusieron en contacto con De Rojas», porque ellas querían tener los «sacramentos y la santa misa».

Al parecer les convencía más a las religiosas la doctrina de la Pía Unión más que la del Vaticano II, pese a que su clausura y sus trabajos para la comunidad son fruto del Concilio. Sin embargo, la Pía Unión ha tomado las riendas de la espiritualidad del convento de Belorado.

Para el religioso, «son dos iglesias totalmente distintas», la que él representa y la conciliar. Una iglesia, la suya, que es «incorruptible por ser la esposa de Cristo»; ahora bien, saca de la ecuación a los fieles, pecadores, porque esta iglesia «como tal es santa, perfecta e incorruptible, inmaculada; que enseña la misma doctrina desde que fue fundada».

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