Suspendidas también las visitas a la residencia de ancianos de Miranda por el rebrote de la ciudad

El levantamiento de esta medida se efectuará cuando las condiciones sanitarias lo aconsejen de acuerdo con las recomendaciones del personal facultativo en aras de preservar la salud de los residentes y trabajadores del centro.

Al igual que ha ocurrido esta semana con la residencia de ancianos de Oña, también gestionada por la Diputación, la de Miranda prohibe las visitas por miedo a contagios de covid-19 entre residentes que puedan ocasionar las visitas. Inmaculada Sierra, diputada provincial responsable del área de Acción Social, ha explicado que las decisiones las toman residencia a residencia en función del escenario, «tanto la dirección del centro como la Diputación entendemos que la prudencia es nuestra mejor guía».

El brote de Miranda de Ebro se califica como mixto y los positivos van en aumento, de los primeros cinco casos confirmados este miércoles 29 de julio se han pasado a nueve positivos. Este brote y los que han surgido en localidades cercanas, aunque de otras comunidades autónomas, han llevado a la Diputación a tomar esta medida.

Medida que no se contempla, por el momento, para las residencias de ancianos que gestiona la Diputación en la ciudad de Burgos pese a que en este municipio también hay registrados tres brotes. La diferencia es que estos parecen estar controlados y las visitas que se registran en los centros de Burgos no mueven a tantas familias o amigos de otras comunidades. Aún así, Sierra advierte que «ahora mismo no se plantea esta medida pero estamos viendo que el escenario cambia rápido».

Eso sí, las precauciones se están extremando en todos los centros con respecto a las visitas. Además, en las residencias de ancianos ubicadas en municipios donde se han registrado rebrotes están prohibidas las salidas esporádicas de residentes. «Sí se permite la salida para periodos vacacionales pero la vuelta está muy regulada, se exige un PCR negativo realizado con dos días de antelación, por ejemplo, y tienen que ser salidas para un periodo largo, no una salida a comer o a pasear», confirma Sierra.