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La plantilla de la Policía Local de Miranda continúa con sus manifestaciones en pro de una mejora de sus condiciones salariales, así como en respuesta a las recientes declaraciones del concejal de Seguridad Ciudadana, Pablo Gómez, que nada han gustado entre los agentes. Y es ... que las fiestas de San Juan del Monte vuelven a poner en evidencia la comprometida situación por la que atraviesa el cuerpo en cuestión de personal, hasta el punto de que habrán de reforzarse los efectivos de la Policía Nacional para suplir la falta de recursos humanos entre los municipales.
Así las cosas, Gómez señalaba al hecho de contar con dieciocho agentes de baja como causa principal de la dificultad para la cobertura de los turnos. Pero la plantilla sostiene que los problemas no radican en la «incapacidad temporal» de determinados agentes, sino en la falta de efectivos necesarios para alcanzar los cincuenta y siete estipulados en la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) del propio Ayuntamiento. Alegan, además, que algunas bajas son provocadas por presiones internas «derivadas de la jefatura» y mencionan que la falta de agentes no se limita a las bajas, ya que, según fuentes policiales, se asignaron turnos a tres de los agentes que llevan un año de baja.
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En este contexto, la plantilla ha trasladado su protesta a la céntrica Plaza Prim donde, de nuevo, han mostrado emblemas reivindicativos y han compartido el que consideran un pequeño triunfo en esta batalla contra la administración local: «este martes 23, el fiscal estimó hechos objetivos en relación a la vulneración de los derechos fundamentales de los agentes y el Juzgado admitió a trámite nuestra denuncia contra el Ayuntamiento», celebraban.
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